lunes, 31 de agosto de 2009

SOBRE LA CUMBRE SOCIAL Y POLÍTICA

En esta página del Colectivo Yuca Brava fue “colgada” hace cerca de una semana un análisis de coyuntura sobre los problemas del Movimiento Estudiantil Colombiano y el resto del movimiento social, el cual, a nuestro juicio, lo allí anotado aún persiste. Pero en lo transcurrido de tiempo desde cuando fue “colgada” nuestra lectura

hasta la fecha de hoy, aconteció la Cumbre Social y Política la cual fue impulsada por las bases del heroico movimiento social colombiano pero que, desafortunadamente, fueron las directivas de las centrales obreras del país quienes tomaron la vocería e intentaron –en algunos casos con éxito- dilatar la posición de las bases, aunque también se desnudó su oportunismo y su mamertismo social conciliatorio con la burguesía del país. La vocería las asumieron estos nefastos dirigentes debido a que las centrales son las únicas que se les permite hacer paros de carácter nacional. Dichas directivas, desde un comienzo –e inclusive antes del evento-, se mostraron contrarias a los anhelos de las bases obreras y populares que claman por acciones de hecho y no por acciones de derecho que es por donde quiere la reacción criolla e imperialista –por medio de la OIT y centrales patronalistas internacionales como la actual Confederación Sindical Internacional (C.S.I.)-, desaprovechando, como se menciona en la lectura de coyuntura hecha por el Colectivo, el potencial de lucha del INDOBLEGABLE pueblo colombiano.

LO POSITIVO ES QUE POR FIN VAN A HABER MOVILIZACIONES, al igual que asistieron sectores religiosos con conciencia de clase y conciencia social, pero es condenable que mientras todas las mesas –increíblemente 15 mesas cuando las bases proponían solamente 5, con ejes muy concretos- concluyeron con la necesidad de hacer manifiesta la inconformidad del pueblo a través del PARO NACIONAL, pero los arrodillados en las directivas de las centrales obreras, cuando después de culminado el evento, se reunieron dizque para “unificar criterios” e hicieron una resolución en la cual reza que Paro se debe hacer hasta el próximo año y no en octubre como fue la voluntad de las mayorías. Lo anterior tiene un tufillo de de paro politiquero. Pero esto no fue lo único: desde el principio se fue muy excluyente con gente que no pertenecía a organizaciones sociales o con gente que se acercaba a este proceso. Igualmente, quien no se encontraba organizado o en ciertas mesas como la mesa de Conflicto Armado, por ser joven no se tenía en cuenta las opiniones. Si bien la Cumbre fue un espacio amplio que permitió ver las diferentes perspectivas también se puedo ver que se hacen diferenciaciones erráticas como público-privado, a pesar de que se habló, en las distintas mesas, de unificación de propuesta. En este sentido fueron muy importantes las intervenciones de los compañeros de las universidades PRIVADAS, públicas y sectores clasistas que desenmascararon tesis fatuas y rimbombantes que pretenden, en el fondo, no buscar consenso y una solución política y negociada al conflicto social y armado, sino tesis que hablan que el diálogo debe ser entre Estado y población civil, o el discursito leguleyo de cierta organización muy minoritaria que sigue negando las causas sociales por las cuales se origina el actual conflicto armado o aquellas organizaciones que le hacen juego electorerismo ramplón como solución a los problemas de las mayorías. Estas organizaciones no entienden que la DEMOCRACIA ES PARTICIPACIÓN Y NO MERAS ELECCIONES, es decir hay más Democracia (demos= pueblo, cratos= poder, democracia= poder del pueblo) cuando el pueblo está en la huelga, en la lucha universitaria, en la confrontación callejera o en la carretera, etc, que ir a votar por un caudillo. Igualmente es criticable que el evento haya sido un jueves, un viernes y un sábado, puesto que no permitió una mayor presencia de las bases, sino en algunos casos representaciones burócratas, los consecuentes que tienen fuero o de electoreros de tiempo completo. Se notó en las distintas mesas que los oportunistas que catalizaron la Cumbre tienen grandes deficiencias investigativas y por ende de conciencia, lo que hacía que algunos solo tuvieran un discurso monótono y no soluciones concretas. Por último, el día sábado, fecha en la que se exponía las relatorías y conclusiones de las mesas, fue desordenado por la cantidad de mesas, lo que retrasó mucho más de lo esperado la culminación del evento, fuera que hicieron presencia politiqueros del Polo y Partido Liberal, quienes han asumidos posiciones muy ambiguas en relación con las luchas de masas y hasta en algunos casos las han condenado, lo que se tradujo en un abandono masivo del recinto por parte de los asistentes. Además que las intervenciones de los politiqueros busca-votos no fue al final o al principio sino entre ponencias de las distintas mesas. De la misma manera se pretendió omitir la ponencia de FENSUAGRO y de la Federación Sindical Mundial (F.S.M., federación de corriente clasista), pero estos heroicos compañeros tomaron la palabra y sin micrófono expusieron y fueron respaldados. A nuestro juicio, los representantes de esta Federación debieron ser quienes hicieran las ponencias, crítica que ya les fue hecha y ellos nos respondieron lo que explicamos en el primer párrafo, que tiene que ver a qué tipo de organizaciones se les permite hacer o convocar paros nacionales. Aún así demostraron ser la organización que en Colombia tiene más,

En el caso de la Mesa de Jóvenes tampoco estuvieron ausentes los oportunistas pero estos estuvieron desenmascarados gracias a las atinadas intervenciones de los muchach@s del COLECTIVO YUCA BRAVA, las cuales arrancaron sonoros aplausos y de ahí en adelante las posiciones de los demás asistentes fueron de respaldo a lo propuesto por nuestros militantes: sí al Paro Nacional, sí a la creación de un pliego de jóvenes, retomar el sentido clasista de los jóvenes y sí a la solución política y negociada al conflicto social y armado que debe culminar con cambios estructurales, fuera de aceptarse nuestras críticas a los días en que fue planeada la Cumbre y que hubiese una mesa de jóvenes cuando ellos -los jóvenes- debían estar en las diferentes mesas debatiendo sus problemas y luego sí realizar una mesa de unidad juvenil. De resto las organizaciones ya reconocidas por el propio estudiantado, a excepción de la FEU de Universidades Públicas, se quedaron en las mismas ambivalencias y parloteando problemas a nivel muy general sin puntualizar. Inclusive, hubo contradicción entre sus dirigencias y bases, cosa que se reflejo en las relatorías. Es de tener en cuenta que a esta mesa acudieron sectores como RedePaz de la presidencia de la república, el movimiento mira, ONG’s que solo fueron a criticar a la juventud actual. Pero quienes tenemos claros nuestros objetivos no solamente los rebatimos sino que la GRAN mayoría de jóvenes –el sector más amplio de los muchach@s asistentes iban sin pertenecer a organización alguna-, apoyaron las propuestas del Colectivo y de la FEU y encararon a los representantes de la oligarquía, debatieron a los oportunistas -y sus eternas tesis de siempre sin soluciones- y se comprometieron a luchar desde distintos escenarios, siendo temas centrales la lucha por la objeción de conciencia y contra el ser-vicio militar obligatorio (reclutamiento forzoso) y el acceso a la educación, además, como se mencionó el apoyo al paro y constitución de pliego.

Los aspectos positivos de todas las mesas radican en el consenso en temas como el rechazo a la presencia de bases yankees, el Paro Nacional, el diálogo como método para superar el actual conflicto social y armado y que de lejos este es un pueblo guerrero a pesar de lo “cagaditos” de algun@s.

Para enfrentar el oportunismo, el COLECTIVO YUCA BRAVA y la FEU comenzaremos unas reuniones para unificar pliegos –nos preguntamos qué pasa con los de FEU privadas, quienes fueron los grandes ausentes en una actitud que cada vez se les ve más común- y desde el COLECTIVO CONVOCAMOS a los sectores clasistas a reunirnos a finales de septiembre para centralizar el pliego popular, con el fin de jalonar el Paro Nacional desde la base y que no se politiquee con la movilización, sino que esta tenga un trasfondo político a partir de las necesidades de los distintos sectores sociales.

HISTORIAL DE PARAPOLITICOS




PARAPOLÍTICOS DETENIDOS

-Miguel de la Espriella, ex senador de Córdoba.
-Eleonora Pineda, ex representante a la Cámara, detenida en la cárcel de El Buen Pastor en Bogotá.
-Jorge Luís Caballero, ex representante del Magdalena, en los próximos días aceptará cargos. Está detenido.
-Rocío Arias, ex representante a la Cámara, se encuentra en libertad y a la espera de que se emita su medida de aseguramiento.
-Muriel Benitorevollo, ex representante a la Cámara, se encuentra detenida en el Buen Pastor y en los próximos días se someterá a sentencia anticipada.
-Wilmer José Pérez Padilla, ex alcalde de San Antero, Córdoba, detenido.
-William Montes, senador, Bolívar, detenido.
-Karelly Lara, representante, Magdalena, detenido.
-Reginaldo Montes, senador, Bolívar, detenido.
-Jorge Luís Caballero, ex representante, Magdalena, renunció a su investidura. Detenido.
-Ángel Daniel Villareal, diputado, Sucre, detenido.
-Jhony Guillermo Villa, diputado, Sucre, detenido.
-Walberto Estrada, diputado, Sucre, detenido.
-Pedro Pestana (líder indígena), bajo jurisdicción de el resguardo San Andrés de Sotavento, Sucre
-Antonio de Jesús Martínez (líder indígena)


CONDENADOS

-Eric Morris, representante a la Cámara. Seis años de prisión y 2 mil salarios mínimos.
-Alfonso Campo Escobar, ex representante. Multa por más de 1.600 millones de pesos y prisión por seis años.
-Trino Luna, ex gobernador de Magdalena. Cárcel por 3 años y ocho meses.
-Nelson Stanp Berrío, ex diputado de Sucre. Multa de 430 millones de pesos y prisión por tres años.
-Edilberto Castro, ex gobernador del Meta.
-Miguel Ángel Pérez, ex gobernador del Casanare. A seis años de prisión, aunque fue por enriquecimiento ilícito de particulares y por fuera del escándalo de la parapolítica, fue una de las primeras en hacerse en contra de un político vinculado las autodefensas.

A JUICIO

-Dieb Maloof, ex senador, renunció a su investidura, detenido.
-Jairo Merlano, ex senador, renunció a su investidura., detenido.
-Álvaro Araujo, ex senador, renunció a su investidura. Detenido.
-Álvaro García, ex senador, renunció a su investidura., detenido.
-Mauricio Pimiento, ex senador, César, renunció a su investidura., detenido.
-Luís Eduardo Vives, ex senador, Magdalena, renunció a su investidura. detenido.
-Juan Manuel López, ex representante, Córdoba, renunció a su investidura.

INDAGATORIA

-Vicente Blel, senador, Bolívar, detenido.
-Luís Humberto Gómez, senador conservador, detenido.
-Mario Uribe, senador, Antioquia, renunció a su investidura
-Luís Alberto Gil, senador, Santander, renunció a su investidura
-Óscar Josué Reyes, senador, Santander
-Luís Alfonso Riaño, representante, Santander
-Luís Carlos Torres, senador, Meta
-Jairo Fernández, representante, Sucre
-Carlos Clavijo, ex senador
-Gonzalo García, representante, Tolima
-Hernando Molina, gobernador
-Luís Carlos Ordosgoitia, ex congresista, Córdoba, detenido.
-Alfredo Cuello Baute, representante a la Cámara
-Álvaro Morón Cuello, representante, César
-Jassir Farak Mendoza, diputado, Sucre
-José Manuel Herrera, representante, Santander, renunció investidura
-Oscar Wilchez, representante Casanare, detenido.
-Álvaro Antonio Cabrales
-Edwin José Mussi Restom, ex alcalde de Ovejas, Sucre
-Ramiro Suárez Corzo, ex alcalde de Cúcuta, N. de Santander
-William Pérez, ex gobernador de Casanare
-Mauricio Esteban Chaparro, ex alcalde de Sabanalarga, Casanare
-Jorge Eliécer López Barreto, ex alcalde de Tauramena, Casanare
-Henry Montes Montes, ex alcalde de Maní, Casanare
-Raúl Cabrera Barreto, ex alcalde de Villanueva, Casanare
-Aleyder Castañeda, ex alcalde de Monterrey, casanare
-Leonel Torres, ex alcalde de Aguazul, Casanare
-César Ricardo Chapín, ex alcalde de Tamalameque, Bolívar
-Rosa Stella Ibáñez, ex alcaldesa de Soledad, Atlántico
-Fulgencio Olarte Morales, ex alcalde de Zona Bananera, Magdalena
-Luís Saleman, ex alcalde de San Onofre, Sucre
-Nazly Zambrano, ex alcalde de Algarrobo, Magdalena
-José Francisco Zúñiga, ex alcalde de Santa Marta, Magdalena.

VERSION LIBRE

-Óscar Suárez, senador, Antioquia
-Mauricio Parodi, representante, Antioquia
-Ciro Ramírez Pinzón, senador conservador, Boyacá
-Dispón Ferney Tapasco, representante a la Cámara
-Rubén Darío Quintero, senador, Antioquia
-Óscar Iván Zuluaga, ministro de Hacienda
-Gonzalo García Angarita, representante, Tolima
-Alfredo Cuello Baute, representante a la Cámara
-Edgar Benitorevollo, ex diputado, Sucre.

INDAGACION PRELIMINAR

-Miguel Pinedo, senador Magdalena
-Julio Manzur, senador, Córdoba
-Zulema Jattin, senadora, Córdoba
-Habib Merheg, senador, Risaralda
-Héctor Julio Alfonso, ex representante de Bolívar, renunció a su investidura.
-Fernando Tafur, representante a la Cámara, Bolívar
-Adriana Gutiérrez, senadora, Caldas
-Gabriel Zapata, senador, Antioquia
-Guillermo Rivera, representante, Putumayo
-Luís Fernando Almario, representante, Caquetá
-Jorge Anaya, gobernador, Sucre
-Sabas Enrique Balseiro, alcalde de San Onofre
-Musa Basaile Fayad, representante, Córdoba
-Rodrigo Burgos de La Espriella, ex senador, Córdoba
-Freddy Sánchez, ex congresista, Córdoba
-Remberto Montes, ex congresista, Córdoba
-Álvaro Antonio Cabrales Hodeg, diputado, Córdoba
-Sigifredo Mario Senior Sotomayor, ex alcalde de Tierra Alta, Córdoba
-Wilmer José Pérez Padilla, ex alcalde de San Antero, Córdoba
-José María López, ex gobernador, Córdoba
-Emilio Enrique Ángel Barco, Partido Liberal
-Hernando Díaz Mendoza, ex alcalde de la Jagua de Ibérico
-Aleider Castañeda, ex alcaldesa de Monterrey, Casanare
-Jorge Luís Feris Chadid, ex congresista
-José María Imbeth, ex representante, Bolívar.

MENCIONADOS

-Javier Cáceres, senador, Bolívar.
-David Char, senador, Atlántico
-Mussa Besaile, representante
-Luís Alfredo Ramos, ex senador y Gobernador de Antioquia
-Piedad Zuccardi, senadora
-Alonso Salazar Jaramillo, Alcalde de Medellín
-Luís Élmer Arenas, senador, aparece en los correos de ‘Ernesto Báez’.
-Nelly Blanco, diputada, Sucre
-Pedro Patrón Luna, ex alcalde de Coveñas
-Daniel Contreras Serje, alcalde de El Guamo
-Guillermo León, alcalde de San Jacinto
-Efrén Hernández, ex gobernador de Casanare
-Guillermo Jaramillo Martínez, ex gobernador de Tolima
-Jorge Rafael Garay, ex acalde de Coveñas, Sucre
-Pedro Patrón Luna, ex alcalde
-Mario Prada, ex alcalde de Valencia, Córdoba
-Salomón Nader, ex congresista
-Libardo López
-José María López
-Mario Pineda, ex alcalde de Valencia
-Ferney Bertel, ex alcalde de Buenavista
-Rodolfo Montes, ex alcalde de Lorica
-Martín Álvarez, ex alcalde de San Antero
-Moisés Nader, ex alcalde de Montelíbano
-Wilson Negrete, ex alcalde de San Bernardo del Viento
-Julio Álvarez, ex alcalde de Chinú
-Carlos Rodríguez, ex alcalde de Chinú
-Carlos Vergara, ex alcalde de Puerto Escondido
-Nelly Blanco, diputada, Sucre
-Libardo Simancas, ex gobernador de Bolívar
-Héctor Ignacio Rodríguez Acevedo, ex concejal de Santa Marta, Magdalena

Información tomada de los periódicos el Mundo, el Colombiano, El Nuevo Siglo, el Tiempo, el Occidente, el Heraldo, Vanguardia Universal.

domingo, 23 de agosto de 2009

Escrito de Coyuntura



El movimiento estudiantil es inexistente a pesar de los grupos y organizaciones de estudiantes que existen. Hoy el estudiantado se encuentra disperso a pesar de las ganas de transformación y cambio de individuos y pequeños grupos que no se deciden a proponer o incorporarse a nuevas organizaciones o las que ya tienen trayecto. Pero el movimiento estudiantil no es el único… en el caso de los trabajadores, indígenas y barrios, también la dispersión se encuentra a la orden del día.

Esto se debe que NO hay organizaciones que centralicen las diversas peticiones de las bases y donde las dirigencias NO orientan sino que concilian con los explotadores, desechando el gran potencial combativo del nuestro heroico pueblo como es el caso de la CUT, donde de 21 del comité ejecutivo, 18 son del PDA, cuyo tendencialismo perjudica enormemente la Unidad de Mando que debe caracterizar las luchas de la clase obrera. En el tema estudiantil esto se refleja en el escepticismo general hacia las organizaciones estudiantiles que muy pocas tienen la disciplina como un principio y la lucha como un medio de alcanzar los objetivos o transformaciones.

Por otra parte hay una gran ausencia de Conciencia de Clase y solo se ven las luchas a un nivel personalista –en el caso concreto actual contra Uribe- hasta el punto que cuando se van los ministerios y o puestos de los diferentes gobiernos, se olvida lo lesivo de su paso por las distintas instituciones. Otro de los hechos que han favorecido a la dispersión estudiantil es la confusión de los gremios con los partidos donde no los militantes de las organizaciones que militan a su vez en partidos, no luchan por las reivindicaciones inmediatas y de ahí continuar elevando los niveles de conciencia de clase, sino que llegan más con teorías, ni siquiera propuestas, que para much@s les son ajenas o cuando militan en partidos que tienen participación en las elecciones, botan el trabajo gremial y se relegan todo a las elecciones. Inclusive, hoy hay organizaciones que no tienen relevo generacional o muchos grupos no tienen trabajos continuados sino que varían de semestre en semestre o sencillamente los trabajos nacen muertos.

Por último, la situación externa producida por la política represiva del actual gobierno que no le importa traspasar fronteras, inventar falsos positivos de todas las pelambres contra los países hermanos, ha hecho que el actual gobierno se encuentre aislado y esta presión conviene, hoy la consigna es: “¡Ni guerra entre pueblos, ni paz entre clases!

lunes, 17 de agosto de 2009

Berlusconi comiendose los mocos

Arremetida contra resguardo emberá‏


DENUNCIA PÚBLICA
NO CESA EL ASEDIO EN CONTRA DE LA
COMUNIDAD INDÍGENA DE CAÑAMOMO-LOMAPRIETA
RIOSUCIO Y SUPÍA CALDAS


Miércoles 12 de agosto de 2009


Las Autoridades Indígenas Tradicionales del resguardo de Cañamomo-Lomaprieta, denuncian ante las instituciones y organismos de Derechos Humanos del Estado, a las organizaciones hermanas de carácter social y popular, a los organismos internacionales defensores de los Derechos Humanos, ONGS y a la opinión pública en general que:
A pesar de la denuncia del pasado 28 de julio sobre los hechos en los cuales ocho hombres armados y vestidos de civil sin ninguna identificación, hicieron presencia en la comunidad de Portachuelo perteneciente a nuestro resguardo, en dos camionetas cuatro puertas, una de color blanco y la otra de color azul, identificadas con las placas BIB 698 de Bogotá y OUB 987 de Manizales, los cuales pretendieron tomar las huellas de identidad, los nombres y los documentos de identificación de un grupo de jóvenes que se encontraban jugando fútbol en la cancha de la comunidad. Después de que los comuneros y comuneras valerosamente enfrentaron a estos hombres solicitándoles su identificación, se pudo constatar que se trataba de agentes del DAS; institución que hasta el momento no ha dado ninguna claridad sobre este confuso hecho al interior de nuestro territorio indígena.
El día 29 de julio en horas tempranas de la noche, se presentaron nuevamente hechos en los que hombres armados vestidos de civil, encapuchados y sin ninguna identificación, estuvieron preguntando a varios comuneros con fotografías en mano por dos líderes de la comunidad de Panesso.

Posteriormente, en la primera semana del mes de agosto nuevamente la comunidad de Panesso en horas tempranas de la noche, detecta la presencia de varios hombres que de manera sospechosa vigilaban la casa de uno de los líderes por los que habían preguntado el día 29 de julio. Estas situaciones han venido generado gran preocupación al interior de nuestra comunidad, ya que se teme por la vida y la integridad física de nuestros líderes.
Alertamos acerca del inminente peligro que corre nuestra comunidad y responsabilizamos al gobierno y al Estado colombiano frente a cualquier hecho que ponga en riesgo la vida y la integridad física de nuestros comuneros y comuneras, y líderes señalados, ya que la responsabilidad primaria de protección de los derechos humanos recae de acuerdo con los principios constitucionales y el articulado de los Tratados y Convenios Internacionales sobre el Estado Colombiano, al ser éste el sujeto responsable de velar por el cumplimiento de lo consagrado en la Carta Política y por ser el que adquiere los compromisos en materia de derechos humanos y de derecho internacional humanitario ante la comunidad internacional.
Por tal razón, el mayor deber jurídico del Estado, es el de prevenir las violaciones frente a estos derechos y tomar las medidas necesarias para investigar, identificar, juzgar y sancionar a los responsables por su acción u omisión.
Reiteramos nuestro llamado urgente a la solidaridad de las organizaciones hermanas, ONGS y organismos internacionales de Derechos Humanos, para que cese el ataque y persecución en contra de la organización indígena del resguardo de Cañamomo-Lomaprieta y del Pueblo Embera Chamí de Caldas.

AUTORIDADES TRADICIONALES
RESGUARDO INDÍGENA
CAÑAMOMO-LOMAPRIETA
RIOSUCIO-SUPÍA CALDAS

Vida del Libertador I (1783- 1809)‏

Vida del Libertador I (1783- 1809)‏


VIDA, OBRA Y PENSAMIENTO DE
SIMÓN BOLÍVAR:

ARBOL GENEALÓGICO Y VIDA DESDE 1783:

La familia de Simón Bolívar era originaria de España, exactamente de Vizcaya. El cuadro genealógico paterno de El Libertador se remonta hasta 9 generaciones atrás, (contando con la de El Libertador como “ego”), cuando Miguel Ochoa de la Rementería y Bolívar se casó con María de Adixpe. De la unión, uno de sus hijos (Martí de Ochoa de Bolívar) se casaría con Magdalena Ibarguen y de ambos nacería Simón de Bolívar, bichozno de El Libertador, quien se casaría con Ana Hernández de Castro y estos tendrían un hijo que se llamaría igual que el padre, Simón de Bolívar, y quien contraería nupcias con Beatriz Díaz de Moreno, además de trasladar su vivienda y fortuna a Venezuela. De esta pareja nacería el tatarabuelo de Simón Bolívar, Antonio de Bolívar y cuya pareja sería Leonor Rebolledo. Nacería un hijo a quien llamarían Luís de Bolívar y Rebolledo y que se casaría con Ama María de Martínez y de quienes nacería el abuelo paterno de El Libertador, Juan de Bolívar y Martínez. La abuela paterna sería Petronila de Ponte Marín (nacida el 7 de mayo de 1684 y fallecida el 20 de julio de 1786) y quien pariría a Juan Vicente Bolívar y Ponte (nacido en 1726 y fallecido el 19 de enero de 1786), padre del Libertador. Este último contraería nupcias con María de la Concepción Palacios (nacida el 9 de diciembre de 1758 y fallecida el 6 de junio de 1792).

De María Concepción, su cuadro genealógico –materno de Simón- se remonta a sus padres quienes serían Feliciano Palacios y Gil (nacido el 7 de mayo de 1684 y fallecido el 20 de julio de 1786) y Francisca Blanco Infante.

De Juan Vicente -quien era coronel- y de María de la Concepción, nacerían: Maria Antonia (nacida el 1 de noviembre de 1777 y fallecida el 7 de Octubre de 1842), Juana Nepumucena (nacida el 16 de mayo de 1779 y fallecida el 7 de marzo de 1847), Juan Vicente (nacido el 30 de mayo de 1781 y fallecido en julio de 1811) y Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar y Palacios (nacido en Caracas el 24 de julio de 1783 y fallecido el 17 de diciembre de 1830 cerca a Santa Marta, en la Quinta de Pedro Alejandrino). La familia de Simón Bolívar pertenecía, en La Colonia, a la presuntuosa clase de los <>, que dentro de la Provincia tenían primacía en todo, exceptuando en el pleno poder político. Fuera de lo anterior, un pariente donaría parte de su patrimonio, llamado <>, a nombre del casi recién nacido, Simón Bolívar. Este pariente sería el Juan Félix Jérez- Aristiguieta y Bolívar, cura de la iglesia católica.

Más, El Libertador, quedaría huérfano muy temprano: como ya se mencionó su padre fallecería el 19 de enero de 1786, cuando Simón tenía menos de tres años y su madre fallecería el 6 de julio de 1792, muy probablemente de tisis, cuando su cuarto hijo casi llegaba a los 9 años. Es de tener en cuenta que María de la Concepción no podía amamantar a Simón, puesto que sus quebrantos de salud provenían de muchos años antes de su nacimiento. A quien le correspondió la tarea de nodriza y de mamanteo sería a la esclava negra Hipólita. Se dice que años antes de empeorar la salud de María de la Concepción, solían ir ella y sus cuatro hijos a sus haciendas, especialmente una llamada San Mateo, en los valles de Aragua (en Venezuela actualmente). Al fallecer la madre, las hermanas de El Libertador no tardarían en casarse y quien debió hacerse cargo del pequeño Simón sería su abuelo, Feliciano Palacios y Gil, que bajo su custodia, el futuro libertador de gran parte del continente americano asistiría a la Escuela Pública, regentada por el gran maestro venezolano Simón Rodríguez.

Pero mientras Simón hacía sus años de estudio fallece su abuelo y la responsabilidad de hacerse cargo de él recae en su tío materno Carlos Palacios, con quien no se la llevaría muy bien al comienzo: el 23 de julio de 1795 abandona la casa de su tío y se presenta a la casa de su hermana Maria Antonia con el fin de poder vivir con ella y su esposo. Lo anterior conduciría a un conflicto jurídico por su custodia. Al día siguiente, cuando Simón cumplía los 12 años, María Antonia tuvo que presentarse ante la Real Audiencia, la cual resuelve que el niño se puede quedar con ella. Más, el 31 de julio, Carlos Palacios pide una orden para que Simón sea sacado de la casa de María Antonia y sea custodiado en la casa de su maestro, Simón Rodríguez. 5 días más tarde, el futuro Libertador sería sacado a la fuerza de la casa de su hermana mientras el niño gritaba que de sus bienes podían disponer, pero no de su persona, pues en ésta solo mandaba él... igual fue sacado a la fuerza, aunque volvería a escaparse 8 días después de la casa de Rodríguez, pero esta fuga sería muy corta porque ese mismo día sería devuelto por el propio Confesor del Ilustrísimo Obispo, con la recomendación explícita de su maestro –Simón Rodríguez- de no reprender al niño. El 11 de septiembre, Maria Antonia y su esposo piden que Simón sea trasladado de la casa de Rodríguez al Colegio Seminario en Caracas. El pleito se soluciona el 14 de octubre cuando se le hace una <> a Simón, <> con la intención de que vuelva a la casa de su tutor y de su tío, Carlos Palacios, bajo la enseñanza de su maestro Simón Rodríguez, quien durante todo este conflicto tuvo que ganarse la confianza del futuro Libertador y con quien desarrollaría desde ese momento una gran amistad entorno a la educación y emancipación independentista.

Por tres años recibiría de las enseñanzas de Rodríguez quien prefería combinar la teoría con la práctica, así como la exploración de facultades de sus discípulos, que la rígida educación confesional de la época, en manos de la iglesia católica. Hasta 1899, Bolívar recibiría enseñanzas de otro joven casi de la misma edad: Andrés Bello, quien tendría una gran carrera literaria y quien se interesaba, igual que Bolívar, en temas de geografía e historia y quien posteriormente también sería precursor independentista.


1798- 1803:

El 4 de julio de 1798 Simón Bolívar recibe del Rey el título de Subteniente de la Sexta Compañía del Batallón de Milicias de Blancos de los Valles de Aragua. El 19 de enero de 1879 se embarca en el puerto venezolano de La Guaira en el navío “San Idelfonso” con rumbo a Madrid, acompañado por su amigo Esteban Escobar, pero se detendría el 2 de febrero en el puerto de Veracruz, Méjico, donde pasaría más de un mes hospedado en la casa del oidor Aguirre. Volvería a la mar el 20 de marzo, en el mismo navío, para retomar su viaje a España no sin antes pasar dos días en la Habana con su amigo Esteban. Llegarían a Madrid el 10 de junio donde es recibido por otro tío, de nombre Esteban Palacios, persona que lo lleva a conocer la Corte de Aranjuez y con quien se iría a vivir el 1° de agosto, junto con otro tío: Pedro Palacios. En España, Simón, perfeccionaría sus conocimientos literarios y científicos, además de educarse como hombre avezado en esgrima y baile (a esto último, dicen, ¡sí que le sacó provecho!)

El 30 de septiembre de 1800, desde Madrid, le escribe a su tío Pedro, quien se encontraba en Cádiz, sobre sus intenciones de casarse con María Teresa del Toro y Alayza, mujer de antepasados venezolanos. El 20 de marzo de 1801, el joven Bolívar recibe su pasaporte y se puede dirigir a Bilbao, lugar donde vivía su futura esposa. El 23 de agosto, le escribe de nuevo a su tío Pedro expresándole de nuevo sus intenciones de matrimonio pero igualmente sus ganas de volver inmediatamente –cosa que no haría- a Venezuela, fuera de lamentarse sobre la situación de su tío Esteban en prisión a raíz de un incidente en el Puente de Toledo. El 29 de diciembre, desde Bilbao, da la orden a su apoderado y tío de Caracas, Carlos Palacios, de enviar 200 fanegadas de cacao a su futuro suegro, don Bernardo Rodríguez del Toro.

Desde el 13 de enero de 1802, Simón se hallaba en Bayona de camino a París y de la Ciudad Luz viajaría a Amiens para ver las fiestas por la paz y luego vuelve a España. El 16 de febrero recibe su pasaporte en Amiens dado por el Embajador de España, Caballero de Azara. El 30 de marzo recibe las capitulaciones matrimoniales celebradas por poder extendido en la ciudad de Santander. Posteriormente, el 29 de abril recibe su pasaporte en Bilbao para poder ir a España, firmado por el corregidor Marcelino Pereira. El 26 de mayo El Libertador contraería matrimonio con María Teresa y viajarían en julio a Venezuela para llegar a finales del mes de agosto a Caracas. Se establecen en la casa del Vínculo de la Concepción, esquina de las Gradillas, teniendo en mente la joven pareja de tener hijos y una vida a base de las haciendas…. pero el matrimonio duraría muy poco: a escasos meses, exactamente el 22 de enero de 1803, muere de fiebre amarilla María Teresa, cuyos restos serían enterrados al día siguiente en la Capilla de la Santísima Trinidad, en la Catedral de Caracas. El deseo de Simón Bolívar es volver a España. Para ello pide prestados 20 mil pesos de la Renta del Tabaco para reintegrarlos, en Cádiz, con el valor de los frutos de sus haciendas que tiene enviados a España, pero dicha suma, por el momento, no se la pudieron dar. El 31 de agosto, Simón recibe de parte de la Renta del Tabaco la suma de 12 mil pesos y se compromete a devolverlos en Cádiz al Ministro de Hacienda de España e Indias a los cuatro meses de aceptada la libranza y que serían pagados tal como lo prometió Bolívar: con los frutos de sus haciendas remitidos a los señores españoles Aguado y Gruceta. El 24 de octubre otorga poder a su hermano Juan Vicente para que administre sus bienes y se embarca luego para España, en donde desembarcaría a finales de diciembre, en el puerto de Cádiz. Para este momento, El Libertador, tiene 20 años.

1804- 1809:

Durante enero de 1804, Simón Bolívar permanece en Cádiz y a principios de febrero se dirige a Madrid. En abril parte de Madrid a París, donde llega a principios de mayo. El 18 del mismo mes, presencia la proclamación de Napoleón Bonaparte como Emperador de Saint Cloud. En septiembre, en París, trata con el Barón Humboldt a quien le plantea el tema de la independencia de América pero el sabio le reconoce que si bien el momento es favorablem, no hay hombres capaces de dirigir el movimiento. Igualmente, Simón, se hace muy amigo del eminente físico Bondpland. El 6 de abril de 1805 parte de París para Italia, acompañado de sus amigos Fernando Toro y Simón Rodríguez. En Milán, los tres, siendo el 26 de mayo, asisten a la coronación del Emperador Napoleón Bonaparte como rey de los romanos, ante la indignación de Simón Bolívar quien no acepta que Bonaparte hubiese preferido el título de Emperador que el de Primer Ciudadano de la República. Ese mismo día asisten a la gran revista militar en la llanura de Monte Chiaro, cerca de Castiglione, precedida por el Emperador. De Milán viaja a Venecia, luego a Ferrara, Bolonia, Perugia y de ahí a Roma en donde visita las ruinas de la que fuese hace milenios la capital del mundo, junto a su maestro y amigo Simón Rodríguez. En la mañana del 15 de agosto, ambos Simones, ascienden a la cúspide del Monte Sacro y en dicho lugar Bolívar levanta el brazo derecho y hace su histórico juramento: “Juro que no daré descanso a mi brazo, ni reposo a mi alma, hasta que no haya roto las cadenas que nos oprimen por voluntad del poder español”. Días después, el 3 de septiembre, visita el volcán Vesubio donde asciende hasta el cráter con el Barón Humboldt y otro eminente físico francés: Gay-Lussac. En diciembre vuelve a París donde pasa la mayor parte del año de 1806. Vale la pena decir que si bien Bolívar quedó viudo, supo llevar el luto: durante este viaje tendría amores con Teresa Laisné, en Bilbao y con Fanny Du Villars en París, fuera de ingresar a la Masonería en la Ciudad Luz.

En septiembre de 1806, Bolívar, parte a Hamburgo y en octubre se embarca para América. El 1° de enero de 1807, llega a Charleston y visita Washington, Philadelphia, New York y Boston. Se embarca con rumbo al puerto de La Guaira –Venezuela- entre abril y mayo, llegando a Caracas en Junio. En septiembre tendría un pleito con Antonio Nicolás Briceño por linderos de tierras de Aristeguieta, en el Tuy, el cual se prolongaría hasta la llegada del Capitán General Emparan, en mayo de 1809. Durante estos años se hacen reuniones clandestinas en las que participan los hermanos varones Bolívar (Juan Vicente y Simón), mientras que Napoleón Bonaparte penetra en España pero comete un gran error: impone un rey extranjero, su hermano José –más conocido como Pepe Botellas- lo que hace que el pueblo español no aguante y estalle la guerra en la península, destacándose Pablo Morillo quien más tarde lucharía contra el ejército de Bolívar.

El 28 de julio de 1809, Simón Bolívar es nombrado Justicia Mayor de Yare pero el Consejo Municipal de Caracas le impuso obstáculos porque él no quiso llenar una formalidad que consideró degradante al prestar juramento para el desempeño del cargo. Entretanto, continuaban las reuniones secretas, las cuales aumentaban en organización y orientación política, gracias a las noticias napoleónicas que eran confusas y contradictorias.

Vida del Libertador II: 1810-1812‏

Vida del Libertador II: 1810-1812‏

1810:

El 19 de abril de 1810 en el cabildo de Caracas, después de una insurrección popular orientada por quienes se reunían clandestinamente, el gobernador Capitán General Emparan debe dirigirse públicamente ante el pueblo: al preguntar “¿queréis mi gobierno?”, un “¡NO!” rotundo estalla desde el pueblo mientras que detrás de Emparán se encontraba el canónigo Madariaga el cual hacía gestos negativos. Se organiza, este día, el primer gobierno independiente de Latinoamérica estallando así el movimiento revolucionario independentista bajo la tutela de la Junta de Caracas. En ese momento Simón Bolívar se encontraba en los Valles de Aragua.

En mayo, La Junta asciende a rango de Coronel a Simón Bolívar, quien el 6 de junio sería enviado a Londres en calidad de diplomático, junto con Andrés Bello -como secretario- y Luís López Méndez. El 10 de Julio llegarían a Portsmouth y de inmediato se ponen en contacto con Francisco de Miranda, precursor de La Independencia y quien tenía 30 años más que Bolívar, llevaba pelo largo y un arete en la oreja derecha, fuera de ser aficionado a las flautas y las damas chinas... claro que también a las de carne y hueso: tuvo amores con la zarina de Rusia Catalina, con la duquesa de Beauve- Salambert, con Lady Priscilla de Snowball, fuera de hacer mozas a varias de las mujeres del generalato de los ejércitos de la Revolución Francesa (tal vez por eso su nombre está inscrito en el Arco del Triunfo de París). Pues bien, Miranda era un hombre alta alcurnia: conoció en vida a Washington, Jeffersson, Napoleón, La Fayette, Talleyrand, el rey de Suecia, al de Polonia, a Haydn, Jeremías Betham, Priestley, Chateaubriand, Federico II de Prusia y a Potekin (y a su esposa Catalina, mucho más). El 17 de julio tanto Mirando como el resto de diplomáticos, tienen una conferencia con Lord Wallesley, en su casa de Aspley.

El 20 de julio de ese mismo año, en la ciudad de Santafe, (hoy Bogotá), estalla lo que se conoce como el grito de la independencia en la provincia de Cundinamarca (hoy, gran parte del territorio colombiano, especialmente lo que hoy es la región andina): acá los conspiradores –quienes hacían reuniones clandestinas meses atrás- con el cuento de homenajear al Comisionado Regio don Antonio Villavicencio, el cual era un criollo ecuatoriano curtido en las cortes españolas, enviaron a dos provocadores, Francisco Morales y su hijo Antonio, dizque a buscar de “buena fe” un florero a la casa de un despótico, racista y elitista español que andaba por estas tierras: el señor José González Llorente. Cuando los Morales comentaron de sus intenciones para agasajar a Villavicencio, les dio por la “bobadita” de pedir el mejor florero del español, el cual era único y traído desde tierras muy lejanas. González Llorente cayó enterito en la provocación y exclamó “¡Me cago en Villavicencio y en todos los americanos!”. En vez de alcanzarle un Lomotil o una sal de frutas para el estómago, los morales decidieron romperle la cara, la casa, fuera de eso pedir para él la cárcel y dejar en la memoria de la gente que su apellido era Llorente. Después de la golpiza salio el pueblo santafereño a las calles vitoreando a Bonaparte y a su hermano Pepe. La muchedumbre gritaba cabildo abierto pero Juan Jurado, un criollo tinterillo del virrey, propuso que en vez de cabildo abierto se hiciera cabildo extraordinario, muy en contra de lo que habían planificado los conspiradores, pero como al pueblo le sonaba igual apoyaba con cada discurso a cualquiera de los bandos. La diferencia era que un cabildo extraordinario era una sola sesión, mientras que el abierto podría prolongarse y tomar decisiones políticas que derivaran en una Junta lo que sería igual al inicio de la revolución, en la provincia cundinamarquesa. Jurado se había apegado a las tesis sobre el legalismo del virreinato defendidas por otro criollo, nacido en Cúcuta y abogado que vendía bienes en Santafe: Francisco de Paula Santander.

En medio del borbollón apareció otro abogado de apellidos Acevedo y Gómez, quien era un excelente orador, en un comienzo pidió una Junta pero por vía legales: pidió prudencia, justificó la providencia del virrey Amar y Borbón y propuso que el virrey aceptara la Junta quedando aún como Virrey, es decir sin cambio alguno en las esfera del poder. Ante la confusión de lo hechos y pasada la media noche, la muchedumbre comenzaba a dispersarse mientras que Francisco Morales y su hijo le hacían recordar a Acevedo y Gómez lo que le pasó en 1781 a Ambrosio Pisco y a José Galán, precursores del Movimiento de los Comuneros, quienes fueron traicionados por el virrey Amar y Borbón y fueron torturados y mutilados, siendo sus miembros expuestos en diferentes puntos de varias ciudades como escarnio público. Acevedo y Gómez cayó en cuenta de su insensatez, cambió de parecer y a puro grito proclamó: “¡Si perdéis este momento de efervescencia y de calor, si dejáis escapar esta ocasión única y feliz, antes de doce horas seréis tratados como insurgentes! ¡Ved los calabozos, los grillos y las cadenas que os esperan!”... y la muchedumbre, que con cada buen discurso se dejaba llevar de un lado a otro, comenzó a gritar : “Junta, Junta”. Se llamaría Junta Suprema, quedando el virrey ya no como virrey sino como Presidente y, al mejor estilo santanderista, se proclamaría que se debía derramar hasta la última gota de sangre en defensa del legítimo monarca de España. El día 23 de julio se descubriría un retrato de Fernando VII. Mientras tanto, los conspiradores criollos se volvieron a reunir secretamente y resolvieron reorganizar al pueblo y conducirlo a la toma del poder, por las vías de hecho, logrando antes del 15 de agosto expulsar al Virrey, no sin antes de amenazarlo con la horca y de haber semi-desnudado a su esposa, con la gran fortuna que ni Bolívar ni Miranda pasaban por el lugar… ese fue el Grito de Independencia en la Provincia de Cundinamarca.

Mientras esto sucedía, la misión diplomática venezolana de Miranda, Bolívar, López Méndez y Bello en el viejo continente hacen la propuesta de independencia al gobierno inglés, el 21 de julio. El 16 de septiembre, Miranda recibe en su casa de Londres (Grafton Street, Piccadelly) al profesor Lancaster y a los tres diplomáticos de Caracas. El 21 del mismo mes, Simón Bolívar, Andrés Bello y Luís López Méndez se embarcan en el bergantín inglés “Saphire”, en Inglaterra, hacia el puerto venezolano de La Guaira. El 7 de diciembre rinden informe a la Junta de Gobierno sobre su misión en Londres. Poco tiempo después, desembarcaría Francisco Miranda y se uniría a lo que se conocería como la Sociedad Patriótica.

1811- 1812:

El 19 de abril de 1811, la Sociedad Patriótica celebra el primer aniversario de la revolución, destacándose por sus palabras Simón Bolívar, José Félix Ribas y Antonio Muñoz Tébar. El 3 de julio, Simón proclama un célebre discurso ante las Sociedad Patriótica y en él pronuncia la siguiente frase: “Pongamos sin temor la piedra fundamental de la libertad Sudamericana”. Dos días después se firmaría el Acta de Independencia y con ella se proclama la Primera República, que moriría en el verano 1812. El 20 de julio, partidarios de España se levantan en Valencia pero desde Caracas marchan tropas comandadas por el general Francisco Miranda, quien tiene desacuerdos con Bolívar sobre ideas militares –Miranda no lo quiere en el ejército-, pero por influencias del Poder Ejecutivo Simón marcharía a la cabeza del Batallón Aragua, teniendo su <>, es decir, su primer combate, el 23 de julio, un día antes de cumplir los 28 años. La lucha es sangrienta. El 13 de agosto, Miranda envía a Bolívar a Caracas con la noticia de triunfo. El Libertador llegaría a la capital venezolana el día 15.

Cuando apenas se comenzaba a organizar la Primera República, el 26 de marzo de 1812 –jueves santo-, un terremoto destruyó Caracas, La Guaira, Barquisimeto y otras ciudades, causando gran número de víctimas, heridos y pérdida de bienes. Este hecho y fecha es aprovechada por lo monjes para denigrar contra la independencia, pero Bolívar, sobre las ruinas del Convento de San Jacinto, pronuncia las siguientes palabras: “Si la naturaleza se opone a nuestros designios, lucharemos contra ella y la haremos que nos obedezca”. Aprovechando la confusión del terremoto, Domingo Monteverde, un oficial español, parte desde Coro y ocupa varias ciudades con sus tropas que están frescas y llenas de entusiasmo, mientras que las patriotas están con la moral baja. Aún así, el 4 de mayo, a Simón Bolívar se le encarga el mando de Puerto Cabello, como Comandante Político y Militar de su Partido pero en junio el Cabildo, de mayorías realistas (se les decía “realistas” a las tropas y simpatizantes de la corona y realeza española) se oponen a las disposiciones de Bolívar y se declaran en su contra. A finales de mes, el 30 de junio, se subleva la guarnición del Castillo de Puerto Cabello con el apoyo de la población y hacen retirar a Bolívar y sus tropas, después de resistir 6 días. Los patriotas tienen que abandonar el puerto en el bergantín “Celoso”.

El 24 de julio, bajo la promesa de Monteverde de no perseguir a los patriotas, Miranda decide capitular en San Mateo. Bolívar, Miranda y otros jefes patriotas se trasladan a La Guaira. Allí le escribe Bolívar a Josefa Maria Tinoco “El honor y mi patria me llaman a su socorro”. El 30 de julio, Simón y otros jóvenes patriotas pretenden hacer una reacción con los simpatizantes de la causa y sus tropas para luchar contra Monteverde, ante la negativa de Miranda. Al día siguiente, un grupo de jóvenes oficiales, entre los que se encontraba Simón, resuelven hacer prisionero a Francisco Miranda pero por este acto, el comandante de La Guaira, Manuel María de las Casas, se opone al proyecto emancipador de Bolívar. Ese día llegan las tropas realistas de Zerveris por órdenes de Monteverde y apresan a casi todos los patriotas. El 1° de agosto, escondidos, Bolívar se traslada a Caracas con Francisco Ribas mientras que Miranda es apresado y luego enviado a España a la cárcel de La Carraca, cerca a Cádiz, donde pasa cuatro años hasta que fallece el 14 de julio de 1816. El 2 de agosto 1812 Simón se refugia en la casa de un amigo español: el marqués de Casa de León.

Gracias a la ayuda de su amigo personal, Francisco Iturbe, el 26 de agosto, Bolívar es llevado desde la residencia donde se encontraba escondido a la Casa de Gobierno, lugar en el que recibe el pasaporte gracias a gestiones de Iturbe ante Monteverde, quien ignora que al firmar y conceder el pasaporte a Simón está firmando la sentencia de muerte del Imperio Español en América. Al día siguiente Simón Bolívar se embarca en La Guaira hacia Curazao, mientras que las cárceles se llenan de simpatizantes patriotas y los pelotones realistas de fusilamiento trabajan todos los días.

El 19 de septiembre, Simón, le pide a su amigo Francisco Iturbe que se sirva elegir otro administrador para sus bienes y pronuncia las siguientes palabras: “... el hombre de bien y de valor debe ser indiferente a los choques de la mala suerte” y “sobre mi corazón no manda nadie más que mi conciencia.... los beneficios que se hacen hoy, se reciben mañana, porque Dios premia la virtud en este mundo mismo”. El 8 de octubre le pide a su tío Juan Nepomuceno Ribas que sea fiador y afirma “... mi honor es preferible a todo... me vería como un hombre indigno, si fuera capaz de asegurar lo que no estoy cierto de cumplir”. A finales de mes viaja a la Nueva Granada y el 27 de diciembre de Cartagena se dirige al Soberano Congreso de la Nueva Granada, implorando protección para los hijos de Venezuela. El 15 de diciembre firma en Cartagena la famosa “Memoria Dirigida a la Nueva Granada” en el que publica su acción para los años venideros: unidad de mando para luchar hasta conseguir la victoria y la unión de los países hispanoamericanos, fuera de pronunciar las siguientes palabras: “Id veloces a vengar al muerto, a salvar la vida al moribundo, soltura al oprimido y libertad a todos. Sólo los ejércitos aguerridos son capaces de sobreponerse a los primeros infaustos sucesos de campaña...”, “... en el orden de las vicisitudes humanas no es siempre la mayoría de la masa física la que decide, sino que es la superioridad de la fuerza moral la que inclina hacia la balanza política...” y “... el valor, la habilidad y la constancia corrigen la mala fortuna. Yo soy... siempre fiel al sistema liberal y justo que proclama mi patria”, entendiendo como “sistema liberal” un Estado laico, es decir, sin interferencia de las instituciones religiosas en sus políticas. El 21 de diciembre recibe el nombramiento de Comandante de Barranca y con un pequeño ejército, el 24 de diciembre, ocupa Tenerife.

Vida del Libertador III: 1813- 1815‏

Vida del Libertador III: 1813- 1815‏
1813:

El 8 de enero de 1813, Simón llega al Puerto Nacional de Ocaña con tropas de caballería e infantería. Más un ejército español, acampado cerca de Cúcuta, se prepara para invadir Nueva Granada. Simón sale a su encuentro y el 28 de febrero hasta comienzos de marzo, el ejército neogranadino combate en el Valle de Cúcuta, logrando, el 1° de marzo, ocupar a San Antonio del Táchira. Ese mismo día Bolívar hace una proclama a los soldados de Cartagena y de la Unión y durante este mismo mes es nombrado por el Congreso de la Nueva Granada como Brigadier de los Ejércitos de la Unión y Ciudadano de la Nueva Granada. El 7 de mayo, Bolívar recibe del presidente de la Confederación de la Nueva Granada, Camilo Torres, la autorización para que las tropas neogranadinas que el Libertador comanda, invadan Venezuela. Desde el 14 de mayo, con setecientos hombres, en tan solo tres meses, Bolívar y sus guerreros logran derrotar a seis mil hombres del ejército realista comandados por Monteverde, en la llamada “Campaña Admirable”. El 14 de mayo entra en Mérida donde se le comienza a conocer como “Libertador” y el 31 destaca a Atanasio Girardot, quien es el Comandante en Jefe de la Vanguardia y un guerrero curtido, para tomar Trujillo. Simón, el 8 de junio, hace en Mérida una Proclama que culmina con el anuncio de Guerra a Muerte contra el Imperio Español. El 14 del mismo mes, Bolívar entra a Trujillo y al día siguiente firma el Decreto de Guerra a Muerte y termina con estas palabras: “... Españoles y Canarios: contad con la muerte, aún siendo indiferentes, sino obráis con valor y diligencia en obsequio de la libertad de América. ¡Americanos: contad con la vida aún cuando seáis culpables! En ambos lados, la lucha se establece sin cuartel”. El 24 de junio convoca en Asamblea General al gobierno, municipalidad y notables de la capital y deja instalado el gobierno republicano del la Provincia.

Posteriormente, el 6 de julio, las tropas de Bolívar liberan Barinas y por esos días en los Altos de Niquitao, una columna del ejército patriota, comandada por Ribas, embosca a una división chapetona (española) embistiendo por el frente con la infantería y por la retaguardia con la caballería, hasta derrotarlos. El 28 de junio, Simón hace una nueva proclama a los españoles y canarios en la que los invita a “…gozar de la felicidad de vivir entre nosotros en paz y armonía”. Bate a los realistas en Horeones y el 31 de ese mismo mes vence en Taguanes. Ocupa las ciudades de Barquisimeto, San Carlos y Valencia. El 4 de agosto, Bolívar accede a la proposición del gobernador interino, Manuel del Fierro, para tratar las bases de una capitulación española. El 6 de agosto entra triunfante a Caracas y ese mismo día envía una comisión para tratar una capitulación Y CANJE DE PRISIONEROS con Monteverde, quien se encuentra replegado en Puerto Cabello. El 8 de agosto se dirige al Supremo Congreso de la Nueva Granada participándole del restablecimiento de La República de Venezuela (Segunda República). Más hasta julio de 1814 sería un año muy difícil para los venezolanos hasta el punto de que es catalogado como “Año Terrible de la Historia de Venezuela” por las sucesivas derrotas y desgaste del ejército patriota. El 9 de agosto, Bolívar exclamaría: “Al silencio de los muertos, sucedieron las vivas a la libertad”.

El 6 de septiembre de 1813 se crea el Segundo Decreto de Guerra a Muerte. El 11 del mismo mes, desde la línea donde se comanda el sitio de Puerto Cabello, Simón dispone un decreto para pasar por armas a cuantos defraudaron los caudales de la Renta del Tabaco, vendiendo la especie clandestinamente o dilapidándola con robos y manejos ilícitos. El 20 de septiembre lanza el Manifiesto a las Naciones del Mundo sobre los acontecimientos de Venezuela en los años de 1812 y 1813, el cual contenía la siguiente frase: “... Caracas no sólo ha convidado, sino que desea var -palabra de la época- entrar por sus puertos a los hombres útiles que vengan a buscar asilo entre nosotros, y a ayudarnos con su industria y sus conocimientos sin inquirir cuál sea la parte del mundo que les haya dado la vida”. Cinco días más tarde es nombrado por el Congreso de la Nueva Granada como Mariscal de Campo de la Unión. El 30 de septiembre combate en Bárbula enfrentando a los hombres realistas comandados por José Tomás Boves que han logrado salir del cerco patriota. Bolívar envía 3 columnas comandadas por Girardot para el encuentro con los españoles y cuando estaba triunfante el ejército patriota, es atravesado por una Lanza el comandante Girardot, quien queda herido de muerte... reina la confusión en ambos ejércitos pero los realistas se reorganizan y vuelven a Puerto Cabello. Bolívar hace un Decreto de Honores para honrar la memoria de Girardot y ordena arrancar su corazón del pecho el cual es depositado, el 14 de octubre, con gran solemnidad y con honores militares en la Capilla de la Santísima Trinidad de la Catedral de Caracas. El corazón fue escoltado militarmente y era esperado por Bolívar, el gobernador Mendoza, el general Ribas y otros solemnes patriotas en la Plaza de Capuchinos. Ese mismo día es aclamado Simón Bolívar por la Municipalidad de Caracas como Capitán General de los Ejércitos de Venezuela y el gobernador Mendoza proclama el sobrenombre de <> como don de la patria agradecida. Durante el 18 de octubre pronunciaría: “... Libertador de Venezuela: título más glorioso y satisfactorio para mí que el centro de todos los imperios de la tierra [...] la ley del deber, más poderosa para mí que los sentimientos del corazón...”. El 22 de octubre, como recompensa al ejército, crea la Orden de los Libertadores.

El 14 de noviembre, desde San Carlos, el Libertador le solicita al general Mariño con urgencia el concurso de las Fuerzas de Oriente puesto que el jefe español, José Tomás Boves, ha logrado reunir un poderoso ejército integrado por ágiles guerreros llaneros con los que ha vencido a varias columnas patriotas y guarniciones de Maracaibo y de Coro, arrasando con cuanto patriota se encuentren y ahora van rumbo a Caracas. Desde el 23 al 25 de noviembre se dan combates en Virginia, sufriendo el ejército patriota duras derrotas cerca de Barquisimeto. Más el 5 de noviembre se da la Batalla de Araure, en la que en el momento definitivo de la confrontación, Bolívar, que estaba al frente de la caballería, se lanza a la carga con sus hombres y pone la situación a favor de los patriotas. El 10 de diciembre, con motivo del triunfo de Araure y en símbolo de buena voluntad para negociar se deja en libertad, en Caracas, a 177 españoles prisioneros, de manera unilateral por parte del ejército bolivariano. El 29 del mismo mes, Simón y su ejército vuelven a Caracas y da orden de construir una ciudadela en el centro de la ciudad para asegurar el terreno cuando las tropas estuviesen en campaña.

1814:

El 2 de enero de 1814 se realiza la Asamblea Popular en Caracas, en la iglesia de San Francisco. Bolívar es proclamado por unanimidad Jefe Supremo de Venezuela y proclama un vibrante discurso en el que recomienda formar un gran Estado con todos los países latinoamericanos que, unido a la nación del Norte, estableciera un equilibrio del universo. Pronuncia frases célebres como: “... la Hacienda Nacional no es de quien os gobierna. Todos los depositarios de vuestros bienes deben demostraros el uso que han hecho de ellos”, (entendiendo Hacienda como erario público); “Un soldado feliz no adquiere ningún derecho para mandar a su patria. No es el árbitro de las leyes ni del gobierno; es el defensor de la libertad”; “No envainaré jamás la espada mientras la libertad de mi patria no esté completamente asegurada. Huíd del país donde uno solo ejerza todos los poderes: es un país de esclavos”; “Yo desprecié los grados y las distinciones. Aspiraba a un destino más honroso: derramar mi sangre por la libertad de mi patria”; “Huí de la tiranía, no para ir a salvar mi vida, ni esconderla en la oscuridad, sino para exponerla en el campo de batalla, en busca de la gloria y de la libertad”.

El 28 de enero se suspende la Guerra a Muerte, pero los acontecimientos obligan al ejército patriota a practicarla puesto que el enemigo realista se acerca a la capital. El Libertador arenga a sus tropas: “¿Podrían ser infamados esos venezolanos invencibles, terror de la España, honor de América, admiración del mundo?... ¡Armaos!, ¡Seguid a vuestro jefe que os ha conducido siempre a la victoria!”. El 3 de febrero se la Primera Batalla de La Puerta, en la garganta de Bocachica, cuando el general Mariño llega a la cabeza de un ejército patriota y se enfrenta con Boves hasta derrotarlo, en una jornada que se extendería hasta la noche. El 7 de febrero, Simón publica en “La Gaceta de Caracas” un artículo sobre los sucesos acontecidos en Europa para tranquilizar al público caraqueño y neogranadino que siente la cruel contraofensiva realista en tierras americanas. El 12 de febrero se da la Batalla La Victoria, en Venezuela. El 13 de marzo Simón proclamaría: “Los tiranos no pueden acercarse a los muros invencibles de Colombia sin expirar con su impura sangra la audacia de sus delirios”. Entre el 13 y el 15 de febrero fueron ejecutados 518 españoles en el puerto de La Guaira y 300 en Caracas al no establecerse un cambio de prisioneros ni un alto al fuego. El 20 del mismo mes, Bolívar y sus hombres salen de Valencia a San Mateo, a marchas forzadas, con su Estado Mayor hasta que lograr llegar al día siguiente. El 24 exclamaría: “todos los pueblos del mundo que han lidiado por la Libertad han exterminado al fin a sus tiranos”. El 28 de abril se da la Primera Batalla de San Mateo y en los días siguientes hay combates muy parciales, logrando resistir el ejército patriota por casi un mes. Durante el 15 de marzo surge un decreto del Estado de Cartagena declarando al Libertador como Hijo Benemérito de la Patria. El 17 del mismo mes, hay una acción en la Punta del Monte y el 25 se da la última batalla de San Mateo, ciudad que es tomada por los españoles pero cuando estos iban hacia la casa donde se encontraban las municiones del ejército patriota, Antonio Ricaurte da la orden de desalojar y se inmola a la espera de los realistas, acción que hace que cambie el curso de la batalla. Mientras ocurrían las batallas de San Mateo, Valencia es sitiada por los realistas. La orden de Bolívar al general Urdaneta es clara: <>... y Urdaneta cumple. En medio de las persecuciones a Boves y sus hombres, quienes han sido derrotados por el general Mariño, el 1° de abril, Simón y sus hombres liberan a 1500 prisioneros de guerra patriotas quienes eran arreados por el ejército de Boves a punta de latigazos. El 3 de abril llegaría Bolívar y sus tropas para finiquitar la liberación de Valencia. Dos días más tarde se encontrarían Mariño y Simón Bolívar en La Victoria. El 13 de abril, el Libertador exclamaría: “Yo no he contraído otro mérito que el de adquirir para nuestras armas el triunfo mayor que pueda adornarlas: perdonar a sus enemigos después de habernos vencido”. El 28 del mismo mes, llega a Caracas y publica en la Gaceta el artículo <>, tratando de alentar al público.

El 4 de mayo, Simón Bolívar envía ante el Gobierno de Su Majestad Británica (S.M.B. en muchos libros) a Lino Clemente y Juan Robertson a participar de la independencia de Venezuela y solicitar su reconocimiento. Trece días después se da el combate de Guataparo y el 28 la Primera Batalla de Carabobo. El 15 de junio, Simón Bolívar y el general Mariño son derrotados en la Segunda Batalla de La Puerta. El 17, al llegar a Caracas, Simón decreta la Ley Marcial e inmediatamente despacha a Barbados al Dr. Pedro Gual, William Watson y George Robertson a solicitar de un Almirante inglés 2000 fusiles, 2 baterías de campaña y 1000 hombres para defender a Caracas de las facciones realistas. Al día siguiente, se realiza otra asamblea popular en Caracas. Posteriormente, el 6 de julio, para asegurar los intereses del Estado, se envía a La Guaira el tesoro y la plata labrada en las iglesias. El 7, gran parte de la población de Caracas y del centro de la provincia emprenden la retirada hacia Oriente, vía de Río Chico hasta Barcelona, lugar al que llegarían el 2 de agosto. Este éxodo es producido por las crueldades del ejército realista que en pocos meses asesinó a más de veinte mil neogranadinos y venezolanos. Son dirigidos por Simón y acompañados por 1200 hombres bajo el mando de Leandro Palacios y Carlos Soubblette. A su llegada, El Libertador envía a Martín Tovar Ponte a las Colonias por armas y municiones. Quince días después se da la Batalla de Villa de Aragua de Barcelona, en la que se derrota al ejército patriota. El 25 de agosto Mariño envía a bordo de la cuadrilla del pirata italiano Bianchi armas y municiones y 24 cajones de plata de las iglesias de Caracas, los cuales fueron embarcados previamente, el 7 de julio, en la goleta de Felipe Esteves. Bolívar se embarca en la misma nave del pirata. Luego, el 28 de agosto, llegan a Porlamar pero son rechazados a punta de cañonazos por los hombres de Manuel Piar, quien se ha insubordinado, junto con Ribas, contra Bolívar y el general Mariño. Ante la grave situación, al día siguiente, no les queda de otra a Bolívar y a Mariño que negociar con el pirata Bianchi para que devuelva el tesoro, logrando tan solo una tercera parte del mismo.

El 3 de septiembre llegan Bolívar, Mariño y sus hombres a Curúpano, desterrados por Ribas y por Piar. El 7 de septiembre Bolívar publica su célebre manifiesto en el cual habrían frases como: “Así como la justicia, la audacia de haberla emprendido, la imposibilidad de su adquisición califica la insuficiencia de los medios.”; “... dichisísimo aquel que corriendo por entre los escollos de la guerra, de la política y de las desgracias públicas, preserva su honor intacto...”; “La victoria conducida por la justicia fue siempre nuestra guía...”; “...no es lo asequible lo que se debe hacer, sino aquello a que el derecho nos autoriza.”; “...no son los hombre vulgares los que pueden calcular el eminente valor del reino de la libertad...”; “Dios concede la victoria a la constancia”. Esa misma noche, pistola en mano, Simón y Mariño se dirigen al muelle y se embarcan en el “Indio Libre” y “La Culebra”, al mando de Felipe Esteves, para salir al día siguiente rumbo a Cartagena, ciudad a la que llegan el 19 del mismo mes. El 20, el Libertador, se dirige al Congreso de la Nueva Granada para explicar los sucesos en Venezuela. Un mes después, el 27 de octubre, dirige una proclama en Ocaña a los soldados de Venezuela refugiados en la Nueva Granada y el 12 de noviembre, en Pamplona, realiza otra proclama a la División Urdaneta en la cual se consigna la siguiente frase: “Para nosotros la patria es la América... nuestra enseña, la independencia y la libertad!”. El 24 de noviembre, Simón se presenta de nuevo al Congreso de la Nueva Granada. Explica su conducta. El Presidente Camilo Torres le dice: “Vuestra Patria no ha perecido mientras exista vuestra espada. Habéis sido un militar desgraciado, pero sois un gran hombre”. Tres días más tarde, el gobierno de la Nueva Granada asciende al Libertador a General de División y le encarga someter al Estado de Cundinamarca a la Unión Granadina. Es otra exitosa campaña bolivariana: el 8 de diciembre, al llegar al campo de Techo (hoy Kennedy, donde es Mundo Aventura) se dirige al presidente de Cundinamarca expresándole ideas conciliadoras del liberalismo como separación entre Estado e iglesia, sin olvidar la Unidad de Mando como parte de la táctica (“método”) y estrategia (“objetivo final”) bolivariana: “El Cielo me ha destinado para ser el libertador de los pueblos oprimidos, y así jamás seré el conquistador de una sola aldea. Nuestro objeto es unir la masa, bajo una misma dirección, para que nuestros elementos se dirijan al fin único de restablecer el Nuevo Mundo en sus derechos de libertad e independencia”; “Como amo la libertad tengo sentimientos nobles y liberales, y si suelo ser severo, es solamente con aquellos que pretenden destruirnos”; “Mi ambición se limita a libertar a mi país y a ser estimado como hombre de bienes coetáneos”. Dos días más tarde, el Libertador y sus hombres emprenden la marcha sobre la ciudad de Santa Fe (Bogotá). El 12 de diciembre, capitula el gobierno local. El 17, Simón, diría la siguiente consigna: “...aunque la guerra es el compendio de todos los males, la tiranía es el compendio de todas las guerras.”. El 24 del mismo mes, el Libertador dirige una carta a García Rovira, le comenta su plan de libertar a Venezuela y volver por Cúcuta a libertar el Sur hasta Lima.

1815:

El 23 de enero, Simón es nombrado Capitán General de la Confederación de la Nueva Granada. Se despide de los bogotanos para marchar hacia Cartagena y libertar Venezuela. Pronuncia frases como frases como “...para el logro del triunfo siempre ha sido indispensable pasar por la senda de los sacrificios. La justicia es la reina de las virtudes republicanas, y con ella se sostienen la igualdad y la libertad...”; “...el Cielo nos ha dado la libertad para la conservación de la virtud y la obtención de la patria de los justos”. El 9 de febrero, pronunciaría: “En las guerras civiles es política ser generoso, porque la venganza progresivamente se aumenta”; “Yo sigo la carrera gloriosa de las armas sólo por obtener el honor que ellas dan. Por libertar a mi patria y por merecer las bendiciones de los pueblos”; “Para juzgar de las revoluciones y sus actores, es menester observarlos muy de cerca y juzgarlos desde muy lejos”. El 10 de marzo se detiene en Mompox para recibir los elementos necesarios para su campaña. El 14 del mismo mes, pasa a Sambrano y se encuentra con Torices. Diez días más tarde, en Turbaco, discute con el gobernador del Estado de Cartagena quien le niega las armas y pertrechos necesarios para continuar la campaña debido que hay recelos y algunos piensan que Bolívar quiere erigirse dictador. En vista de la hostilidad y para evitar una guerra civil, Simón Bolívar renuncia al mando pero una junta de jefes y de oficiales del ejército, tanto granadinos como venezolanos, rechazan la renuncia. Más lo anterior no impide a el Libertador avanzar y tomar el Cerro de la Popa, así como la plaza de Cartagena para el día 4 de abril.

El 8 de mayo diría: “Cualquiera que sea mi suerte en lo adelante, mi último suspiro será por mi país”; “...cualesquiera que sean los días que a Providencia me tenga destinados, todos hasta el último serán empleados en servicio de la América”; “El sacrificio del mando, de mi fortuna, de mi gloria futura, no me ha costado esfuerzo alguno. Me es tan natural preferir la salud de la República a todo, que cuanto más dolor sufro por ella tanto más placer interior recibe mi alma”; “¡Dichosos vosotros que vais a emplear el resto de vuestros días por la libertad de la patria!”. El 19 de mayo escribe su primera carta política a Hislop. Posteriormente, el 27 del mismo mes, pronunciaría: “Mi constancia y mis deseos por el bien de la Patria me harán emprenderlo todo, trabajar incesantemente por él, sin reparar en la dificultades”; “Amo la libertad de la América más que mi gloria propia; y para conseguirla no he ahorrado sacrificios”. Mientras esto ocurre llega una escuadra de Pablo Morillo, general realista, a Venezuela. El 10 de julio, el Libertador hace una exposición ante el Presidente de la Nueva Granada de los motivos de su separación del ejército, afirmando que: “El que abandona todo por ser útil a su país, no pierde nada, y gana cuanto le consagra”.

El 22 de agosto, después de leer de periódicos ingleses, el Libertador aconseja al Presidente de las Provincias Unidas de la Nueva Granada, Camilo Torres, sobre no recibir a Napoleón, quien se encontraba buscando asilo en países de América, puesto que “cualquiera que sea su elección, ese país será destruido con su presencia.”. El 6 de septiembre escribiría una carta sobre el porvenir de América española en la que contiene: “¿hasta dónde se puede calcular la trascendencia de la libertad del hemisferio de Colón? Yo deseo más que otro alguno ver formar en América las más grande nación del mundo, menos por su extensión y riquezas que por su libertad y gloria.”; “En las administraciones absolutas no se reconocen límites en el ejercicio de las facultadas gubernativas... un pueblo es esclavo cuando el gobierno, por su esencia o por sus vicios, huella y usurpa los derechos del ciudadano o súbdito.”; “...la masa física se equilibra con la fuerza moral... el interés bien entendido de una República se circunscribe en la esfera de la conservación, prosperidad y gloria”; “Como ésta mi patria, tengo derecho incontestable de desearle lo que en mi opinión es mejor... pienso que los americanos, ansiosos de paz, ciencias, artes, comercio y agricultura, preferirían las repúblicas a los reinos...”; “Seguramente la unión es la que nos falta para completar la obra de nuestra regeneración. El alma de un siervo rara vez alcanza a apreciar la sana libertad: se enfurece en los tumultos, o se humilla en las cadenas.”; “Yo diré a Usted lo que puede ponernos en actitud de... fundar un gobierno libre: es la unión, ciertamente; más esta unión no nos vendrá por prodigios divinos sino por efectos sensibles y esfuerzos bien dirigidos”. Posteriormente, el 28 del mismo mes diría: “Nuestras discordias tienen su origen en la dos más copiosas fuentes de calamidad pública: la ignorancia y la debilidad. Es cierto que el peso de la libertad es liviano, pero también es difícil mantenerlo aún en las naciones más cultas y civilizadas.”; “Cuando los partidos carecen de autoridad, ora por falta de poder, ya por el triunfo de sus contrarios, nace el descontento y los debilita; los jefes subdividen la causa en las tantas partes cuantas son ellos”; “Estamos autorizado, pues, a creer que todos los hijos de la América española, de cualquier color o condición que sean, se profesan un afecto fraternal recíproco, que ninguna es capaz de alterar”.

El 2 de diciembre se ofrece socorrer a Cartagena del asedio de Pablo Morillo, a pesar de las diferencias con los líderes cartageneros: “Un americano no puede ser mi enemigo ni aún combatiendo contra mí bajo las banderas de los tiranos”, proclamaría en la misma fecha. El 10 de diciembre, Simón se salva milagrosamente del puñal de el negro Pío, quien fue disuadido por los realistas para asesinar al Libertador mientras duerme en su hamaca (nunca dormía en camas; gran parte de su vida la pasó lejos del suelo: montado a caballo o en sus hamacas en las que no solo durmió sino en las que también planeó batallas, países, discursos políticos y varios amoríos)... pero providencialmente quien dormía era José Félix Amestoy, quien resulta asesinado. Para el 18, Simón, se embarca en el corsario “La Popa” rumbo a Cartagena pero en alta mar, gracias al pirata “Barbe- en- Fume”, se entera de la capitulación de la plaza y se devuelve, pero al día siguiente hace rumbo hacia Haití para reunirse con el Capitán y Presidente Luis Brión, puesto que el pirata informa que Morillo deja en el asta la bandera tricolor para engañar las embarcaciones patriotas pero aún así muchas han logrado escapar con personas dispuestas a la causa liberadora. El 25, desembarca en los Cayos de San Luis y el 31 llega en la noche a Puerto Príncipe, capital de la isla.

Vida del Libertador IV: 1816- 1818‏

Vida del Libertador IV: 1816- 1818‏

1816:

El 2 de enero el Presidente de Haití, Alejandro Petión, recibe a Simón Bolívar con vivas demostraciones de sincera y leal amistad, además de ofrecer ayuda desinteresada para los proyectos del Libertador. El 7 de febrero se realiza una Asamblea con todos los patriotas en el Arrabal de la Sabana, en los Cayos de San Luís, donde nombran a Simón como Jefe Supremo. El 31 de marzo sale la expedición del fondeadero La Beata rumbo a Margarita (Venezuela), acompañando a Bolívar, Soublette y Mariño. Son un total de 7 goletas las cuales contenían un pequeño puñado de hombres que lucharían contra los poderosos ejércitos de Morillo, además de armas, víveres, municiones, uniformes y hasta una imprenta que les proporcionó Petión.

El 2 de mayo, frente a las islas de los Frailes, se divisa el bergantín realista “Intrépido” cuyo armamento era de 14 cañones y la goleta “Rita”, de cinco. La goleta “Bolívar”, en la que viajaban el Libertador y el almirante Brión, abre fuego contra el bergantín mientras que las demás goletas tienen la orden de interceptar a “Rita” y poner a salvo los bienes para la lucha en tierra firme. Desde el “Intrépido” se contesta con todo su arsenal a la embestida de la goleta patriota. El almirante Brión queda herido más no abandona su puesto hasta alcanzar la distancia requerida para que sean lanzados los garfios y se dé la orden de abordaje, dada por Bolívar. Ambos bandos se tranzan en una lucha feroz con arma blanca abordo del bergantín español: los patriotas se apoderan del alcázar de popa y paso a paso van acorralando a los realistas, pero tan pronto muere el capitán español en el puente de la embarcación, como un valiente en combate, sus hombres se rinden y es arriada la bandera española y en su lugar ondea el pabellón tricolor... “Rita”, fue alcanzada y apresada también. La escuadra española es enviada a Cumaná y el resto de la expedición patriota arriba al puerto de Juan Griego, donde los margariteños los reciben triunfalmente y lugar donde el caudillo del lugar, Juan Bautista Arismendi, puede conferenciar con el Libertador así como repartirse las armas y municiones para los patriotas margariteños.

El 7 de mayo, los patriotas se reúnen en asamblea, en la iglesia de la Villa del Norte, donde ratifican a Simón Bolívar como Jefe Supremo, por unanimidad de los asistentes. El 17 del mismo mes, Simón diría: “El verdadero guerrero se gloria solamente de vencer a sus enemigos, mas no de destruirlos”. El 25, sale del puerto de Juan Griego la expedición libertadora. Posteriormente, el 1° de junio, los patriotas toman Carúpano, fuera de ser tomado el bergantín “Indio Libre” que había caído en manos chapetonas. Bolívar envía a Manuel Piar, después de indultarlo por su alzamiento en el pasado, a Marín y al general Mariño a la Güira con armas para levantar tropas. El dos de junio es decretada la libertad para los esclavos, tal como Simón le había prometido al Presidente haitiano Alejandro Petion. El 26, diría: “El valor es preferible al número y la habilidad es superior al valor; así tenemos confianza”. El 1° de julio el Libertador concibe un plan, después de conocer que desde Caracas han salido un gran número de fuerzas realistas hacia Carúpano, teniendo como táctica embarcarse rumbo hacia Ocumare, en el occidente de Caracas, para luego marchar en una rápida carrera hasta Caracas y tomarla por sorpresa con un golpe de mano, puesto que piensa que está indefensa. El 6 de julio, desembarcan en Ocumare de la Costa, cuyo puerto es tomado sin dificultad. El Libertador ordena a Soublette a invadir con una división los Valles de Aragua y ese mismo días se crea el segundo decreto sobre la libertad de los esclavos. El 15 del mismo mes, las tropas reciben la orden de dirigirse a Choroní para seguir por el interior del continente, pero un subalterno de Bolívar notifica que la división patriota que debe llegar a los Valles de Aragua ha tenido que replegarse, aviso que genera confusión dentro de la tropa. Ahora los hombres de Bolívar se encuentran separados del resto de la fuerza y a punto de ser prisioneros. Simón toma la decisión de suicidarse pero gracias al mulato Bideau, no logra su cometido. Este mismo mulato conduce al Libertador hasta embarcarlo, con sus hombres, rumbo a Bonaire para reunirse con el Almirante Brión. Al día siguiente, la tropa bolivariana se dirige a Choroní en busca de las tropas, pero estas se han marchado. Igualmente sucede en Chuao. Posteriormente, el 18 de julio, temiendo la persecución de los buques de la marina española, los patriotas se dirigen al norte salvándose de la escuadre enviada por Morillo desde Cartagena y por Ocampo –jefe chapetón- desde La Guaira.

El 5 de agosto, el “Indio Libre”, en el cual navegaba el Libertador, toca las costas de Puerto Rico para proveerse de agua y leña pero encalla en una orilla de la isla de Saint Thomas y debe ser auxiliado por una balandra holandesa, a la cual se transborda Simón, y sigue hacia el Este. El 9 de agosto, el Libertador desembarca en la isla Tórtola a su nueva novia Josefina Machado y su madre, así como también a otras familias que los acompañaban. Al día siguiente, en el “Indio Libre”, se dirige hacia la Güira. El 22 del mismo mes, estalla una sedición contra Bolívar por su empeño de invadir Guyana con las tropas que había reunido Piar y Mariño. El Coronel Isava y el licenciado Gaspar Marcano lo salvan de un atentado. Ante estos hechos, un día después, Simón se embarca en el “Indio Libre” hacia Haití, único lugar donde le podían prestar auxilio.

A la altura de Jacmel, la expedición es envuelta por una feroz tormenta de tres días que casi la hace naufragar. El 4 de septiembre llega al puerto de Jacmel donde se reúne con el Presidente Petión y le explica lo sucedido en Venezuela. El 9 de octubre, Simón Bolívar proclama: “...la aclamación libre de sus conciudadanos, única fuente legítima de todo poder humano. Si la lisonja es un veneno mortal para las almas bajas, los elogios debido al mérito alimentan las almas sublimes.”. Luego, el 26 de noviembre, Simón diría: “El sistema militar es de la fuerza; la fuerza no es gobierno.”. Tres días más tarde anotaría que: “...la ambición es una mancha para la verdadera gloria y el mayor esplendor para este brillante adorno, le viene más de la moderación que del poder.”; “El poder sin la virtud es un abuso y no una facultad legítima”. El 21 de diciembre, realiza la segunda expedición a Los Cayos con elementos propiciados por Brión y Petión y el 28 llega a Juan Griego. El Capitán Villaret conduce armas, municiones, víveres y muchos hombres. Al día siguiente, el Libertador procura el apoyo al general Mariño, quien se encontraba sitiando Cumaná, pero éste no acepta y se hace evidente las diferencias entre el General y el Libertador. El 31 de diciembre desembarca Simón Bolívar en el puerto de Barcelona del buque “La Diana”, el cual lo había traído desde Haití.

1817:

1° de enero: el Libertador escribe a sus compañeros de armas ausentes en Guyana, las siguientes frases: “Ustedes volarán conmigo al rico Perú; nuestros destinos nos llaman a las extremidades del mundo americano”; “La fortuna no debe luchar vencedora contra quienes la muerte no intimida; la vida no tiene precio sino en tanto que es gloriosa.”. Desde ese mismo día hasta el 5 de enero escribe a Monagas y a Manuel Piar, que se encontraba en Zaraza, invitándoles a reunirse con él en Barcelona. A Villaret le ordena remitir a Barcelona todo el material de guerra que trae en su buque. El 9 del mismo mes, Simón finge marchar hacia Caracas con Arismendi pero combaten en Clarines, mientras que afirmaba: “Seremos libres, iguales e independientes” y al día siguiente proclamaba: “Unámonos y seremos invencibles”. Trece días más tarde, pronunciaría: “Salvemos la patria cubriéndonos de honor, no menos por nuestra prudencia que por nuestro valor”. El 8 de febrero, es atacado el campo atrincherado que han formado los hombres del Libertador y la guarnición que defiende la Casa Fuerte de la ciudad de Barcelona, logrando repeler el ataque el cual dura todo el día, pero los patriotas son cercados hasta que se agotan los suministros y son pasados a cuchillo. Al día siguiente, en el puente de Neverí, llega el general José Francisco Bermúdez con la vanguardia de la División Mariño. Con Bermúdez, Simón, en el pasado, tuvo grandes diferencias, más desde ese día lucharían hombro a hombro y gestarían una gran amistad. El día 10 del mismo mes llega el general Mariño con el resto de su División y toma el mando de todas las tropas, tal como se le había ofrecido para soslayar las diferencias entre la dirigencia y continuar la unidad de mando. Los días 18 y 19 de febrero, el Libertador dirige duras batallas navales. Para el 25 de marzo, Bolívar, cansado de las constantes oposiciones del general Mariño a sus perspectivas y planes, se dirige a Guayana con algunos oficiales que no comparten las ideas del general Mariño. En Quiamare, Simón y su Estado Mayor se salvan de una celada de los españoles y para evitar caer prisionero deben de atravesar a nado un remanso del río Orinoco.

El 3 de abril, llega Bolívar con una escolta al puerto de Santa Cruz del Orinoco y al día siguiente Manuel Piar se adelanta a recibirlo en el sitio conocido como el Jobito. Posteriormente, el 8 de abril, el Libertador repasa el Orinoco en el sitio de Angosturita. Siete días más tarde recibe en el pueblo del Pao la noticia de la pérdida de Barcelona. En ese mismo lugar encontró al coronel Francisco de Paula Santander –quien jamás estuvo en algún combate- y al teniente coronel Manuel Manrique, quienes lo venían buscando desde Apure. El 27 del mismo mes, Simón y sus tropas son reforzadas con las tropas de José Francisco Bermúdez, Valdés y Armario quienes abandonaron al general Mariño. El 2 de mayo, llega el Libertador al campamento del Juncal en la Mesa de Angostura, donde se reúne con tropas que sitiaban la plaza. El 10 de mayo escribe a los emigrados en las Antillas profetizando que al llegar el Almirante Brión con su escuadra de barcos por el Orinoco, se rendirán los realistas, tal como sucedería después. El 16 de mayo, el Libertador pronunciaría: “...la amistad tiene en mi corazón un templo y un tribunal, a los cuales consagro mis deberes, mis sentimientos y mis afectos”. Luego, el 24 de mayo, acepta la ocupación de la Isla de Fajardo, realizada por el coronel Armario. El 30 del mismo mes, instala su cuartel general en San Miguel y en San Félix, a orillas del río Caroní, donde ha establecido las fábricas de flecheras, cañoneras y curiaras para la navegación fluvial. El 27 de junio, Simón Bolívar exclamaría: “Es preferible la muerte a la expatriación”. El 8 de julio combate en Papagayos e ingresa el capitán Antonio Díaz al Orinoco y al día siguiente lo hace el Almirante Brión con cinco bergantines y dos goletas de guerra. El 17, tal como lo había previsto el Libertador, se rinde la plaza de Angostura, la cual es ocupada el 18. Los realistas eran abatidos cada vez que querían huir de la ciudad. El 4 de agosto, la escuadra de Brión y la escuadrilla de Rafael Rodríguez, dirigidas por el Libertador desde tierra, atacan a la escuadra naval española que se retira en dos grandes columnas pero después de una ardiente pelea son derrotadas en el sitio de Cabrián, zona del río Orinoco. Dos días después, Simón escribe al marqués del Toro las ventajas militares de Guayana: puede tomar por la espalda el territorio enemigo hasta Santa Fe (hoy Bogotá) con facilidad.

El 1° de septiembre, el Libertador pronunciaría: “...es libre el que se resuelve serlo” y el 3 del mismo mes, diría: “Aquel que asegura su honor dedicando su vida al servicio de la humanidad, a la defensa de la justicia y al exterminio de la tiranía, adquiere una vida de inmortalidad al dejar el marco de materia que el hombre recibe de la naturaleza”; “Una muerte gloriosa triunfa sobre el tiempo y prolonga la sublime existencia hasta la más remota posteridad”. Y el 22 diría: “...un buen ciudadano debe siempre pensar con respecto a sí, lo que calcularía con respecto a los demás, poniéndose siempre fuera de la esfera de sus intereses personales y de sus propias inclinaciones”. El 16 de octubre, Manuel Piar, quien para el momento era el comandante del ejército de Guayana conspira, de nuevo, contra Simón Bolívar pero sus tropas no le secundan. Es detenido, juzgado y fusilado. El 28 del mismo mes, Simón asiste al Te Deum para celebrar su onomástico –día santo por el nombre de una persona... antes había la costumbre de ponerle el nombre a un individuo era guiándose por el día de nacimiento y el santo que correspondía a dicho día- y el 30 se crea el Consejo de Estado, quedando como presidente el bravo Almirante Brión y como vicepresidente queda Zea. El 1° de noviembre Bolívar pronuncia: “La primera de todas las fuerzas es la opinión pública.”; “El premio del mérito es el acto más augusto del poder humano”. El 7 de noviembre se crea el Tribunal del Consulado para conocer intereses comerciales y desarrollo de la agricultura. El 23 del mismo mes, El Libertador se embarca en Angostura con una división destinada a reforzar a Zaraza. Dos días más tarde desembarca en Cardenales, puerto del Orinoco, y sigue para reunirse con las tropas de Zaraza.

El final de año es muy azaroso: el 4 de diciembre Bolívar recibe la noticia, en San Diego, de que el comandante realista de apellido La Torre ha propinado una dura derrota al cuerpo principal del ejército en el hato de la Hogaza, dos días antes. El 9 se retira a Javillal y toma medidas enérgicas para reunir más tropas. El 11 decreta la Ley Marcial para levantar el pueblo en masa a favor de la patria. El 19 participa al general José Antonio Páez, quien era jefe patriota de Apure –Comandante General de Apure- y cuyo valor hizo que captara la admiración y respeto de los llaneros debido a sus tácticas magistrales con la caballería, para informarle de sus intenciones de combatir en ese territorio con un ejército. El 27 regresa a Angostura después de haber pasado revista a las divisiones Monagas, Valdés y Torres en las Bocas del Pao. El 30, terminada la disidencia del general Mariño, Simón aprueba que se retire en “exilio” a las islas de Margarita y al día siguiente, el Libertador, parte de Angostura en la cuadrilla comandada por Antonio Díaz.

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1818:

21 de enero en la Urbana, isla del río Orinoco, Simón ha dirigido la marcha de las tropas y se prepara para entrar en Apure. Durante el 26, en le potrero de Araguaquén, se le da a Mariño su credencial para que se establezca en Margarita tal como estaba convenido y el 30, en el hato Cañafístola, se conocen el Libertador y José Antonio Páez quien ese mismo mes había vencido a un ejército realista en la zona de Mocuritas destrozando primero la caballería pero al notar la férrea defensa de la infantería enemiga decide incendiar la hierba y los españoles escapan con numerosas bajas. El 31 de enero, el ejército de Apure aclama a Bolívar en San Juan de Payara. El 6 de febrero Simón y sus tropas atraviesan el Apure por el paso del Diamante, en las flecheras capturadas al enemigo. El 15 y el 17 el ejército patriota combate en la Uriosa y en El Sombrero, respectivamente. Posteriormente, el 18 de febrero, Bolívar se ve obligado a retroceder a Calabozo debido a que el ejército denotaba algo de desgaste. Ese mismo día, El Libertador, pide a Zaraza que traiga la caballería de Alto Llano. El 24, desde Calabozo, pide refuerzos y da orden de concentración de tropas. Tres días más tarde llegaría el general Urdaneta quien toma el mando de la infantería. El Libertador, con la mayor actividad, ha logrado reunir varios contingentes de caballería e infantería. Luego, el 7 de marzo, se da la Batalla de Ortiz y al día siguiente Simón toma la decisión de pasar a la ofensiva y marchar a Villa Cura, cosa que lograría dos días después.

El 11 de marzo, el Libertador crea el Bando de Villa Cura llamando a todos los hombres tomar las armas. De nuevo es abolida la esclavitud en Venezuela por lo que quienes antes eran esclavos deben defender su libertad. El 12, las tropas patriotas comandadas por Simón Bolívar toman un lado de San Mateo y otro de Maracay. El 13, ratifica el bando de Villa Cura en La Victoria. Al día siguiente se preparan las tropas para atacar al ejército realista comandado por La Torre, en la Cuesta, camino a Caracas, pero el 15, al saber el Libertador que las tropas del comandante realista Morillo han ocupado la Cabrera retrocede hacia Villa de Cura. El 16, Bolívar y sus hombres se sitúan en la garganta de La Puerta, a la izquierda del riachuelo de Semen, a esperar al resto del ejército. Ese mismo día, después de una larga y fuerte lucha, son abatidas las tropas de un ejército realista que era comandado por Morales quien es dado de baja pero en plena persecución sobre el resto de hombres españoles llegan los refuerzos de Morillo y le arrebatan la victoria al ejército patriota, no sin antes recibir Morillo un lanzazo que lo atraviesa de lado a lado pero con heroísmo, el general español, se sostiene hasta ganar la partida. Milagrosamente sobrevive. Mientras tanto, Bolívar se retira con los restos de su ejército y el 19 de marzo establece su cuartel general en el Rastro. Dos días después se le incorporan varias partidas, entre ellas los bravos e indispensables llaneros de Páez. El 24 del mismo mes, reunido el ejército, avanzan hasta El Caimán y dos días después avanzan contra La Torre, quien se encuentra en Ortiz. Por la naturaleza del terreno solamente combate la infantería y en la tarde el ejército independiente se retira al hato de San Pablo, en la parte llana.

El 8 de abril sale bolívar de Calabozo con el batallón Cazadores N° 1. El 13 acampan en los Leoncitos y el 16 llegan a la sabana del Rincón de los Toros. En la noche del día siguiente, en medio de una noche sin luna, una patrulla realista consigue introducirse en el campamento patriota y se acerca hasta la hamaca en la que Simón descansa. Afortunadamente un oficial da el alto a los realistas y el Libertador se despierta y tiene tiempo de lanzarse al suelo mientras que las balas enemigas rasgan la tela de la hamaca. El 5 de mayo Simón cae enfermo en San Fernando de Apure. Exactamente un mes después, el Libertador, llega a Angostura y renueva activamente sus disposiciones como Jefe Supremo. El 12 de junio contesta la nota del Supremo Director de las Provincias Unidas del Río de la Plata, don Juan Martín Pueyrredón, del 19 de noviembre de 1916, en la que le manifiesta que cuando logre el triunfo Venezuela convidará a hacer parte de una sola nación a los países del Cono Sur porque “Nuestra divisa sea la Unidad de América Meridional”. El 16 de julio, pide al Presidente de la Alta Corte de Justicia la notificación del Decreto de Libertad de los Esclavos, diciéndole: “En el futuro no habrá más que una clase de hombres: todos serán ciudadanos”. El 29 del mismo mes, el Libertador y Jefe Supremo, contesta negativamente un reclamo que vino a hacer Estados Unidos por medio del Agente Bautista Irvine, por el embargo de unas goletas.

El 12 de agosto, concede a Santander el grado de general de brigada y lo nombra gobernador y comandante general de la provincia de Casanare. El 15 anuncia a los granadinos (hoy colombianos) la campaña que proyecta para libertar ese país, el cual había sucumbido ante la arremetida de Morillo. El 17 de septiembre le escribe a un extranjero: “...deseo testificarle, por todos los modos posibles, la gratitud de Venezuela, mi particular consideración hacia Ud, y la alta estima con que mi la América aquellos virtuosos y magnánimos extranjeros que prefieren la libertad a la esclavitud, y, abandonando su propio país, vienen a América trayendo ciencias, artes, industrias, talentos y virtudes”. El 1° de octubre, Simón reúne el Consejo de Estado, le expone la situación política y militar y su proyecto de reunir el Congreso General. El 7 diría: “Lo mismo es para Venezuela combatir contra España que contra el mundo entero, si todo el mundo la ofende”. El 12 de octubre le escribiría la última carta al agente norteamericano Irvine sobre su reclamación, además de pronunciar: “El valor y la habilidad..., suplen con ventaja al número. ¡Infelices los hombres si estas virtudes morales no equilibrasen y aun superasen las físicas!”. Diez días más tarde el Libertador convoca a elecciones y el 4 de noviembre Simón hace una expedición a Oriente y se haya en Maturín. Al día siguiente celebra una conferencia con el ex-general Mariño, a pesar de sus diferencias y vuelve a Angostura. El 17 del mismo mes, el Libertador le dice a Páez que ejército está preparado y que dentro de poco llegará con sus hombres al Apure.

Vida del Libertador V: 1819-1820‏

Vida del Libertador V: 1819-1820

1819:

El 8 de enero, el prócer De Caicara le avisa a Páez que pronto llegará al Apure con sus fuerzas. El 11, el Libertador llega la boca del Arauca y el 16 llega con su ejército a San Juan de Payara y pasa revista a las tropas de Páez. El 29 del mismo mes, Simón, regresa a Angostura para preparar la instalación del Congreso de Angostura que se lleva a cabo el 15 de febrero y donde Bolívar pronuncia su más célebre discurso con frases como: “...el principio fundamental de nuestro sistema, depende inmediata y exclusivamente de la igualdad establecida y practicada en Venezuela. Que los hombres nacen todos con derechos iguales a los bienes de la sociedad, está sancionado por la pluralidad de los sabios; como también los está, que no todos los hombres nacen igualmente aptos para la obtención de todos los rangos; pues todos deben practicar la virtud y no todos la practican; todos deben ser valerosos y todos no los son; todos deben poseer talentos y todos no los poseen”; “La diversidad de origen requiere un pulso infinitamente firme, u tacto infinitamente delicado para manejar esta sociedad heterogénea, cuyo complicado artificio se disloca, se divide, se disuelve con la más ligera alteración”; “Si el principio de la igualdad política es generalmente reconocido, no lo es menos el de la desigualdad física y moral. La naturaleza hace a los hombres desiguales, en genio, temperamento, fuerzas y caracteres. Las leyes corrigen esta diferencia porque colocan al individuo en la sociedad para que la educación, la industria, las artes, los servicios, las virtudes le den una igualdad ficticia, propiamente llamada política social”; “El sistema de Gobierno más perfecto es aquel produce mayor suma de felicidad posible, mayor suma de seguridad social y mayor suma de estabilidad política”; “...a veces los hombres, no los principios, los que forman los Gobiernos. Los códigos, los sistemas, los estatutos sabios que sean, son obras muertas que poco influyen en las sociedades: ¡hombres virtuosos, hombres patriotas, hombres ilustrados constituyen las Repúblicas!”; “...cuan difícil es dirigir por simples leyes a los hombres”; “Que no se pierdan, pues, las lecciones de la experiencia; las escuelas de Grecia, de Roma, de Francia, de Inglaterra y de América nos instruyan en la difícil ciencia de crear y conservar las naciones con leyes propias, justas, legítimas y, sobre todo, útiles. No olvidando jamás que la excelencia de un Gobierno no consiste en su teórica, en su forma, ni en su mecanismo, sino en ser apropiado a la naturaleza y al carácter de la nación para quien se instituye”; “Debemos confesarlo: los más de los hombres desconocen sus verdaderos intereses, y constantemente procuran asaltarlos en las manos de sus depositarios: el individuo pugna contra la masa y la masa contra la autoridad”; “En todas las luchas la calma de un tercero viene a hacer órgano de la reconciliación... si el Pueblo de Venezuela no aplaude la elevación de sus bienhechores, es indigno de ser libre, y no los será jamás”; “No seamos presuntuosos, Legisladores: seamos moderados en nuestras pretensiones. No es probable conseguir lo que no ha logrado el género humano: lo que no han alcanzado las más grandes y sabias naciones. La libertad indefinida, la Democracia absoluta, son los escollos a donde han ido a estrellarse todas las esperanzas republicanas”; “Ya disfruta el Pueblo de Venezuela de los derechos que legitima, y fácilmente puede gozar; moderemos ahora el ímpetu de las pretensiones excesivas que quizás le suscitaría la forma de un Gobierno incompetente para él”; “Los gritos del género humano en los campos de batalla, o en los campos tumultarios, claman al cielo contra los inconsiderados y ciegos legisladores, que han pensado que se puede hacer impunemente ensayos de quiméricas institucionales”; “Todos los pueblos del mundo han pretendido la Libertad: los unos por las armas, los otros por las leyes, pasando alternativamente de la anarquía al despotismo o del despotismo a la anarquía; muy pocos son lo que se han contentado con pretensiones moderadas, constituyéndose de un modo conforme a sus medios, a su espíritu y a sus circunstancias”; “El amor a la Patria, el amor a las Leyes, el amor a los Magistrados, son las nobles pasiones que deben exclusivamente al alma de un republicano”; “Moral y luces son los polos de una República... moral y luces son nuestras primeras necesidades”; “Si no hay un respeto sagrado por la Patria, por las Leyes y por las autoridades, la sociedad es una confusión, un abismo; es un conflicto singular de hombre a hombre, de cuerpo a cuerpo”; “En el régimen absoluto, el Poder autorizado no admite límites... quizás el grito de un ciudadano puede devenir la presencia de un peligro encubierto o desconocido”; “La esclavitud es la hija de las tinieblas: un pueblo ignorante es un instrumento ciego de su propia destrucción: la ambición, la intriga abusan de la credulidad y de la inexperiencia de hombres ajenos a todo conocimiento político, económico y civil; adoptan como realidades las que son puras ilusiones; toman la licencia por la Libertad, la traición por el patriotismo, la venganza por la justicia”; “...la felicidad consiste en la práctica de la virtud... las buenas costumbres, y no la fuerza, son las columnas de las leyes...”; “...el ejercicio de la justicia es el ejercicio de la Libertad... son los Pueblos más bien que los Gobiernos los que arrastran tras sí la tiranía”; “...renovemos en el mundo la idea de un pueblo que no se contenta con ser libre y fuerte, sino que quiere ser virtuoso”; “No hay crimen donde no hay ley que mande o prohíba, y la ley dejará ser regla de la conducta del hombre si castigase las acciones que existieron antes que ellas”; “Para formar un Gobierno estable se requiere la base de un espíritu nacional, que tenga por objeto una inclinación uniforme hacia dos puntos capitales, moderar la voluntad general y limitar la autoridad pública...”; “Nacidos todos en el seno de una misma Madre, nuestros padres diferentes en origen y en sangre, son extranjeros, y todos difieren visiblemente en la epidermis: esta desemejanza trae un reato de la mayor trascendencia”; “No aspiremos a lo imposible, no sea por elevarnos sobre la región de la Libertad, descendemos a la región de la tiranía”; “...he pretendido excitar la prosperidad nacional por las dos más grandes palancas de la industria: el trabajo y el saber. Estimulando estos dos poderosos resortes de la sociedad, se alcanza lo más difícil entre los hombres: hacerlos honrados y felices”; “De la libertad absoluta se desciende siempre por el Poder absoluto, y el medio entre estos dos términos es la Suprema Libertad Social”; “Unidad, Unidad, Unidad, debe ser nuestra divisa. Teorías abstractas son las que producen la perniciosa idea de una Libertad ilimitada”; “La verdadera igualdad no existe sino en la formación y delante de la ley que liga y comprende a todos indistintamente; premia y recompensa al virtuoso, al justo, al sabio, al valiente, al honrado, al prudente, al industrioso, al activo, al benéfico; y castiga y reprime al vicioso, al injusto, al inmoral, al cobarde, al temerario, la holgazán y al perezoso”; “El que sirve a su Patria más honrosa y útilmente, merece bien con predilección y debe ser preferido y considerado sobre conciudadanos que no han podido o no han querido igualarlo”; “Haz bien a los otros el bien que quisieras para ti. No hagas a otro el mal que no quisieras para ti; son los dos principios eternos de la justicia natural en que están encerrados todos los derechos respecto a los individuos”; “Con respecto a la sociedad, son deberes de cada individuo vivir sujeto y conforme a las leyes; obedecer, respetar y amar a los magistrados y autoridades constituidas; conservar y defender la libertad e independencia de la Patria, y servirla con todos sus esfuerzos, sacrificándole los bienes, la fortuna, la vida, el honor, y aún la misma libertad personal, si fuera necesario”; “No puede ser buen ciudadano ni hombre honrado el que, olvidando que su familia pertenece más a la patria que a si mismo, descuida la educación de sus hijos. Todo padre de familia está obligado a inspirar a la suya amor a la Patria, a la libertad, a la virtud y al trabajo”; “La sociedad desconoce al que no procura la felicidad general; al que no se ocupa de aumentar con su trabajo, talentos o industria las riquezas y comodidades propias que colectivamente forman la prosperidad nacional”; “Es deber de todo ciudadano vigilar sobre la legítima inversión de las rentas públicas, en beneficio de la sociedad...”; “La seguridad consiste en la garantía y protección que la sociedad concede a cada uno de sus miembros para la conservación de su persona, derechos y propiedades. La libertad pública e individual que nace de este principio está protegida por la ley”; “Muchas naciones antiguas y modernas han sacudido la opresión; pero son rarísimas las que ha sabido gozar de algunos preciosos momentos de libertad”; “Yo imploro la confirmación de la Libertad absoluta a los esclavos como imploraría mi vida, y la vida de la República”; “Sólo la Democracia, en el concepto es susceptible de una absoluta libertad”; “Todo hombre se presume inocente hasta que se le declare culpable”; “Observaréis muchos sistemas de manejar hombres, mas todos para oprimirlos, y si la costumbre de mirar al género humano conducido por pastores de pueblos, no disminuyese el horror de tan chocante espectáculo, nos pasmaríamos al ver nuestra dócil especie pasear sobre al superficie del globo como viles rebaños destinados a alimentar a sus crueles conductores”; “El bien como el mal, da la muerte cuando es súbdito y excesivo”; “Si merezco vuestra aprobación, habré alcanzado el sublime título de buen Ciudadano, preferible para mí al de Libertador que me dio Venezuela, al de Pacificador que me dio Cundinamarca, y a los que el mundo entero puede dar”; “...nada es tan peligroso como dejar permanecer largo tiempo en un mismo ciudadano el Poder. El pueblo se acostumbra a obedecerles, y él se acostumbra a mandarlo; de donde se origina la usurpación y la tiranía”; “La propiedad es el derecho de gozar y disponer libremente de sus bienes y del fruto de sus talentos, industria o trabajo”; “La industria de los ciudadanos puede libremente ejercitarse en cualquier género de trabajo, cultura o comercio”; “Son derechos del hombre: la libertad, la seguridad, la propiedad y la igualdad. La felicidad general, que es el objeto de la sociedad, consisten en el perfecto goce de estos derechos”; “El derecho de expresar sus pensamientos y opiniones de palabra, por escrito, o de cualquier otro modo, es el primero y más estimable don de la naturaleza. Ni aún la ley misma podrá jamás prohibirlo, y sólo podrá señalarle justos términos, haciendo responsable de sus escritos y palabras, y aplicando penas proporcionadas a los que la ejercieren licenciosamente en perjuicio de la tranquilidad pública, de la vida, honor, estimación y propiedad de cualquier ciudadano”.

El 16 de febrero, Simón Bolívar, Jefe Supremo, insiste en que el Vicepresidente (Zea) debe encargarse del Congreso de Angostura puesto que el Libertador debe dar comienzo a uno de sus planes más titánicos: atravesar la cordillera que separa a Venezuela de la Nueva Granada y liberar a este país, derrotando las tropas que lo guarnecen mientras Morillo está inmovilizado en Venezuela a causa de la temporada de lluvias. Luego, el 10 de marzo, el Libertador llega inesperadamente al Apure con un batallón de ingleses y el 17 sorprende a la división del comandante chapetón Pereira, en La Gamarra, triunfando en el combate pero aún así los españoles logran huir a través del río gracias a una provisión de canoas. El 2 de abril se da la Batalla de las Queseras del Medio. El 23 del mismo mes, después de ocho días de reposo, Simón con el ejército atraviesan el Arauca, se dirigen al Alto Apure y se establecen en el pueblo de Mantecal. Exactamente un mes después, Bolívar convoca a una Junta de Guerra a los jefes del ejército en la aldea Setenta y les explica su plan de invasión al Reino (de Nueva Granada) y el efecto que debía producir sobre el teatro de operaciones. El proyecto fue aprobado. El 27 de mayo desde Mantecal el Libertador emprende la Campaña de Boyacá.

El 4 de junio se incorpora Páez en Guasdalito, tras haber repelido con gran éxito al ejército de Morillo que había emprendido la ofensiva en los vastos Llanos. La táctica de Páez fue irse replegando estratégicamente, confiando en que la fatiga, las enfermedades y los hostigamientos de sus hombres debilitarán las fuerzas españolas. En Arauca los hostigamientos hacen retroceder a Morillo por lo que el General Páez, al mando de 150 jinetes muy bien seleccionados, provoca a las fuerzas de caballería españolas quienes deciden perseguir a los patriotas pero al enérgico grito de “¡vuelvan caras!” los patriotas dan media vuelta inesperadamente y tras una lucha implacable aniquilan al enemigo que se encontraba fatigado. El mismo 4 de junio, Bolívar le da a Páez las mismas instrucciones que le había escrito antes para colaborar en la campaña. El 12 del mismo mes, entra al pueblo de Tame donde se le une el general Santander. Dos días más tarde, después de atravesar por ríos crecidos y sabanas inundadas, el ejército no le queda de otra que acampar en Tame para atravesar los ríos Aricaporo y Ariporo. El 21 de junio, los patriotas acampan en Toche (hoy Moreno), teniendo en cuenta que no se fuese a mojar la pólvora, ni las armas, ni los pertrechos, ni tampoco a sufrir lesiones e inclusive ahogamientos. Al día siguiente, después de pasar dos quebradas y dos ríos entran en la Villa de Pore, capital de la provincia; allí se reúnen con la división de Santander que les dan comida fresca a las tropas puesto que solo venían comiendo carne curada (carne cruda en sal para que no se pudra). Desde Mantecal habían recorrido 600 kilómetros. El 23 cruzan el río Pauto, el 24 entran a Nuchía, el 25 llegan a Morcote, el 26 suben a la Meseta de Chitacova, donde el frío era muy intenso y el 30, Simón, realiza una proclama a los granadinos anunciándoles la marcha del ejército libertador.

El 5 de julio el Libertador atraviesa con su ejército el páramo de Pisba escogido por Bolívar para no tropezar con fuerzas enemigas como habría ocurrido si hubiesen tomado por el camino real de Labranzagrande. El páramo fue un sendero de indios, lleno de obstáculos y de piedras. No pocos llaneros sucumben ante el frío o caen por los filos. Es de tener en cuenta que la fatiga en los páramos produce bastante sueño, por lo que la gente tiende a dormir... sin volver a despertar jamás. El 11 de julio se da la Batalla de Gámeza en la que antes del combate Bolívar le dice a sus hombres: “No podemos retirarnos por el Páramo; debemos vencer o morir”... los realistas son rechazados. El 12, el Ejército Libertador vuelve a sus antiguas posiciones de Tasco para esperar a la Legión Británica y a otros grupos retardados de la marcha sobre el Páramo y mientras tanto reposan y esperan tranquilos la victoria, tal como dice el boletín dictado por el propio Simón Bolívar. El 18 del mismo mes, por un movimiento de flanco, Bolívar y sus hombres se dirigen a Cerinza. Los españoles, para cubrir Tunja, se establecieron en los Molinos de Bonza. El 20, el Ejército Patriota se sitúa frente a los españoles en los corrales de Bonza. El 25 de julio se da la famosa Batalla del Pantano de Vargas que es un hito para la historia patria: el Libertador ha logrado distraer al ejército español por lo que hace un movimiento hacia Santa fe (Bogotá), pero en el Pantano le es cerrado el paso por hombres realistas al mando del general Barreiro. En una de las furiosas descargas de bayoneta, los chapetones logran hacerse de una colina y desde ahí rechazan los embates patriotas los cuales se repliegan en desorden, perseguidos por la caballería española. Sin embargo, la Legión Británica, compuesta por combatientes voluntarios al mando del Coronel Rooke –y por los cuales, años después, el propio Simón tuvo que intervenir en su favor ante el rey británico puesto que iban a ser juzgados por participar en una guerra ajena y frente a España que era vista como un aliado continental europeo por la realeza-, detienen la caballería española y en un magnífico contraataque recuperan la colina en medio de un fuego intenso. Las fuerzas realistas suben columna tras columna de hombres al asalto de la colina. La Legión Británica se ve abrumada ante el número superior de atacantes pero con gran heroísmo no deja de combatir pero comienza a perder terreno, palmo a palmo, sin regalar nada y sin dejar de pelear. La lucha es feroz de ambas partes. El valiente coronel Rooke cae de su caballo herido de muerte pero sus tropas, de una manera heroica, no caen en pánico y siguen combatiendo a pesar de seguir cediendo posiciones hasta que finalmente la colina queda en manos chapetonas. El ejército patriota se encuentra casi rodeado por el enemigo español de quien debe soportar un fuego mortífero de cañones y bayonetas que se encuentran mejor ubicadas en el terreno, produciendo un número considerable de bajas bolivarianas. En este momento El Libertador se dirige al coronel Rondón, a cuyo cargo se encontraba un contingente de caballería, diciéndole: “Coronel, salve usted la Patria”. Los bravos llaneros se lanzan en una carga épica contra el enemigo destrozando primero la caballería enemiga (muy superior en número) y luego la infantería... los patriotas que habían luchado todo el tiempo, electrizados por la gesta de los jinetes, de manera desordenada pero con un gran frenesí se lanzan contra la colina perdida a manos de los españoles y en un abrir y cerrar de ojos la toman, logrando desalojar los cañones enemigos que por la altura que les daba la colina tenían mayor alcance. De haberse perdido la batalla no habría quedado un ejército patriota que pudiera ofrecer algo de resistencia ante las fuerzas españolas en cualquier parte puesto que habrían quedado a merced de los realistas en Cundinamarca y en Venezuela, después de la temporada de lluvias, Morillo no le costaría llegar por todos los llanos venezolanos hasta Angostura, lo que hubiese echado a pique toda la Campaña Libertadora.

Posteriormente, el 4 de agosto, el Ejército Patriota de nuevo distrae al enemigo español, bastante disminuido y el cual se dirigía a marchas forzadas hasta Tunja por el camino de Toca. El 5 del mismo mes, los patriotas toman el pueblo de Chivatá y el Libertador entra a Tunja, donde hace prisionera a la guarnición realista. El 7 de agosto se da la Batalla de Boyacá la cual daría independencia definitiva a Cundinamarca (hoy Colombia) frente a la dominación española. Se debe tener en cuenta que esta no fue una batalla épica a pesar del gran contenido histórico y simbólico que representa. El verdadero mérito de esta victoria es la planificación para la batalla que hizo el Libertador: por sucesivos movimientos de flanco y caballería logra dividir al ejército chapetón en dos partes y de esta manera los cercan, imposibilitándoles cualquier comunicación entre ambas partes por lo que deben rendirse sin dar pelea. Entre los prisioneros se encuentra el comandante realista Barreiro. Para este momento, Simón y su ejército tenían gran fama y el ejército chapetón tenía un imaginario de invencibilidad de sus pares patriotas. Vale la pena mencionar que los jefes realistas como Morillo, La Torre, Pereira y Barreiro no eran cualquiera: fueron hombres seleccionados por la Corona después de lograr con éxito la expulsión del ejército napoleónico y de los moros en Andalucía... se dice que eran los mejores hombres de infantería de la época pero sucumbieron ante el genio de Bolívar y sus aguerridas fuerzas. El 10 de agosto, se ratifica el triunfo de Bolívar quien libera a Santa fe (Bogotá), sojuzgada tres años antes por el ejército de Morillo. Ante la presencia de los patriotas la ciudad había sido abandonada por el virrey. Los santafecinos reciben con júbilo al Libertador quien cabalga junto con Anzoátegui y Santander –que no sabemos por qué si este último no había participado en ninguna batalla-. Se debe mencionar que para este triunfo, Simón Bolívar, tuvo que sortear los inconvenientes que se presentaban por desobediencia de Páez.

El 9 de septiembre, Simón le propone al Virrey Sámano el canje de prisioneros de Boyacá por los ingleses caídos en Portebelo y los prisioneros existentes en Cartagena. Sámano jamás contestó. Dos días después, Bolívar establece una Vicepresidencia en la Nueva Granada, con las mismas atribuciones que tenían en Venezuela. El cargo le fue conferido a Francisco de Paula Santander. El 17 de septiembre, el Libertador pronuncia: “...la educación e instrucción pública son el principio más seguro de la felicidad general y la más sólida base de la libertad de los pueblos...”. El 20 del mismo mes, Simón Bolívar parte hacia Venezuela. El Santa fe muchos creían que él iba a sucumbir en su empresa por liberar de una vez por todas su ciudad natal. Del 4 al 19 de octubre, Bolívar atraviesa por San Gil, Barichara, Girón, Bucaramanga y Pamplona. El 7 de noviembre diría: “Siempre seréis libres porque queréis serlo. El pueblo que combate, al fin triunfa”. Luego, el 11, proclamaría: “La experiencia me ha enseñado que de los hombres se ha de exigir mucho para que hagan muy poco”. El 19 de noviembre, hallándose en Chita (municipio de Boyacá), recibe la noticia sobre al muerte de Anzoátegui y tres días más tarde llega a Pore. El 5 de diciembre entra a Achaguas después de haber tenido una conferencia con Páez, dos días antes. El 11, llega a la ciudad de Angostura, donde es recibido con triunfo y conducido al palacio de Gobierno. El 17 de diciembre, Bolívar propone la creación de la República de Colombia y el congreso la decreta. Esta nueva República sería dividida por tres departamentos: Quito, Cundinamarca y Venezuela (Ecuador, Colombia y Venezuela de hoy). El 24 de diciembre, el Libertador parte de Angostura a la Nueva Granada.

1820:

El 6 de enero, el Congreso de Angostura, ratifica a Simón Bolívar el título de Libertador. El 11, Simón, llega a San Juan de Payara, donde anota: “La suerte de la guerra es impenetrable para los hombres”. El 16, entrega a Sucre las sumas de dinero que ha recibido de Bogotá para que vaya a Saint Thomas a comprar armas. El 24 del mismo mes, llega a Matiyure y el 29 a Guasdualito con las tropas que conduce desde la Nueva Granada. Posteriormente, el 7 de febrero, en San Cristóbal, da instrucciones a Valdés, quien sigue con tropas a la Nueva Granada. El 25 del mismo mes, Simón diría: “La República gana tanto con la destrucción de un realista como con la de un mal ciudadano”. El 8 de marzo, El Libertador, hace una Proclama a los colombianos sobre la unión de los pueblos humanos en la cual reza: “...con anticipación me lisonjeé de vuestra colocación política en la faz del Universo, de la igualdad de la naturaleza, de los honores de la virtud, de los premios del mérito, de la fortuna, del saber, y de la gloria de ser hombres”. El 22, se acerca a la frontera con Venezuela para ocuparse de la futura campaña. El 19 de abril, diría: “...el que manda debe oír aunque sea las más duras verdades y, después de ser oídas, debe aprovecharse de ellas para corregir los males que producen los errores”. El 20 del mismo mes, el Libertador hace un oficio al Vicepresidente Zea sobre la libertad de los esclavos y exactamente un mes después, en el Rosario, hace varios Decretos a favor de los indígenas, instrucción pública, agricultura y comercio. El 26 de mayo expresaría las siguientes frases: “La educación forma al hombre moral, y para formar un legislador se necesita ciertamente de educación en una escuela de moral, de justicia y de leyes”; “Si hay alguna violencia justa, es aquella que se emplea en hacer los hombres buenos, y por consiguiente felices; y no hay libertad legítima sino cuando ésta se dirige a honrar la humanidad y a perfeccionarle sus suerte. Todo lo demás es de pura ilusión, y quizás de una ilusión perniciosa”; “Sin estabilidad todo principio político se corrompe y termina siempre por destruirse”; “Sufra usted más, y sufra hasta la muerte, que es el destino de los buenos patriotas”. 30 de mayo, diría: “Ciertamente, el oro y la plata son objetos precioso; pero la existencia de la República y la vida de los ciudadanos son más preciosos aún”; el 10 de junio, anotaría: “La paz será mi puerto, mi gloria, mi recompensa, mi esperanza, mi dicha y cuanto es precioso en el mundo”. El 19 de junio es recordado por las siguientes frases bolivarianas: “En los negocios pacíficos con los militares es muy importante ser veterano”; “...la afinidad de principios produce siempre la atracción recíproca en materias políticas”; “Nosotros no debemos ofrecer más que la paz en recompensa de la independencia”. El 22 del mismo mes, expresaría; “...este mundo es una cadena de bienes y de males y no hay cielo sin nubes” y el 23: “La gloria de la patria es vencer o morir”. Tres días después diría: “...las fuerzas... deben unirse y obrar de firme como audacia en el plan y con prudencia en la ejecución... es muy importante premiar a tiempo”.

El 4 de julio permanece en el Rosario hasta fines de mes. El 6 recibe comunicación del comandante chapetón La Torre, proponiéndole, por orden de Morillo, suspensión de las hostilidades. El 27 de agosto, Simón expresaría: “El hombre de honor no tiene más patria que aquella en que se protegen los derechos de los ciudadanos, y se respeta el carácter sagrado de la humanidad: la nuestra es la madre de todos los hombres libres y justos, sin distinción de origen o condición”. El 2 de septiembre, en Plato, por sus servicios a la patria, erige como Villa al pueblo de Plato. El 14 octubre, Simón Bolívar haría una Proclama a los colombianos desde Carache y el 21 del mismo mes, en Escuque, haría otra proclama a los corianos invitándoles a acogerse a las banderas de la patria, donde se consignan las siguientes frases: “Contad con el olvido de lo pasado y con el corazón de vuestros hermanos del ejército libertador”; “El fruto de la injusticia es amargo para todos”. Luego, el 26, propone bases para el armisticio iniciado por el general español Morillo. Posteriormente, el 2 de noviembre, Morillo toma la ofensiva y bate a los hombres del patriota Reyes Vargas en Corora. El ejército libertador permanece en Carache. Al día siguiente, Simón propone al general chapetón un tratado de regularización de la guerra. Días después, el 20 de noviembre, Morillo propone de nuevo la suspensión de armas; el Libertador conviene. Tres días más tarde, Simón expresaría: “En las guerras civiles es donde el derecho de gentes ha de ser más estricto y vigoroso”. El 26 del mismo mes se hacen los tratados de armisticio y regularización de la guerra y al día siguiente se da un hecho histórico: en Santa Ana, se entrevistan los generales Morillo y el Libertador, acordando elevar en el sitio un monumento conmemorativo al acto… al no haber ninguno, mandan a sus hombres a arrastrar una pesada roca en el lugar donde se saludaron por primera vez. Luego cada uno parte por su lado, después de despedirse cortésmente y de hablar de los malos ratos que se hicieron pasar uno al otro, al frente de sus respectivos ejércitos.